En el comunicado, solicitaron a las autoridades nacionales y provinciales que revisen "las políticas públicas que atenten contra el mantenimiento y la seguridad del empleo genuino" y bregaron para que "se elaboren planes y proyectos de Gobierno que generen nuevos puestos de trabajo duraderos, bien pagos y que dignifiquen al trabajador".
Se mostraron también preocupados por la ola de despidos de trabajadores, a la que calificaron de "inquietante".
Señalaron que "si nos damos una mano entre todos, superando los intereses mezquinos y las ideologías podremos encontrar soluciones razonables, factibles y a largo a plazo. La situación social es compleja y de cambios profundos donde uno de los ejes principales del ajuste económico atraviesa y afecta a la clase trabajadora de nuestro país".
Hicieron hincapié en los trabajadores del Estado nacional y de la actividad privada que fueron despedidos en cada una de las provincias del NOA.
Recordaron que "detrás de cada puesto de trabajo hay una persona humana con deberes y derechos y posiblemente una familia que está a su cargo; que en el centro de la economía social y humanista están las necesidades básicas de la persona y no los números; que en una sociedad organizada el Estado no puede desentenderse de regular para que haya una distribución equitativa de las cargas y beneficios y de que no se puede dejar todo en manos del mercado".
Por otra parte, consideraron necesario que se promueva la cultura del trabajo en el NOA "como medio de realización personal y de ascenso social".