En su último libro, "Breves respuestas breves a las grandes preguntas", el científico lanzó su predicción y reconoció que "podría acabar con la raza humana", dicho que expresó en una entrevista con la BBC en 2014.
"Una vez que los humanos desarrollen IA y se rediseñe a sí misma a un ritmo cada vez más rápido, las personas, que estamos limitadas a una lenta evolución biológica, no podríamos competir y seríamos reemplazadas", aseguró .
Según expuso Hawking, quien murió en 2018 a causa de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), "es tentador descartar la noción de máquinas altamente inteligentes como mera ciencia ficción", aunque consideró este accionar como "un error y potencialmente nuestro peor error".
Desde su punto de vista, la gran preocupación, ante el avance de la tecnología, sería el impacto en los empleos de la clase media y la desigualdad que esto generaría.
En una columna para "The Telegraph", el cosmólogo explicó que "la automatización de fábricas diezmó trabajos en la fabricación tradicional, y es probable que el aumento de la inteligencia artificial extienda esta destrucción de empleo profundamente en las capas medias".
Asimismo, el científico entendía que la tecnología traería consigo la eficiencia, generando así mayor desempleo e incertidumbre en cuanto a los puestos de trabajo.
Un informe del "Foro Económico Mundial" sostiene que, durante los próximos cinco años, habrá cambios radicales en el ambiente laboral.
En ese sentido, el organismo detalló que "las funciones con mayor declive son las de oficina o secretaría, siendo las de cajeros de bancos y afines, empleados de servicios postales y cajeros de comercios las que se espera que disminuyan más rápidamente".
No obstante, un estudio realizado por la red de trabajo Indeed, tomando más de 2.600 habilidades en 48 familias, observó que mientras el mercado de trabajo se sigue enfocando hacia lo "remoto", "más altas son las chances de que una tarea realizada de ese modo sea reemplazada por Inteligencia Artificial".
(BBC)
