Por otra parte un docente de la Universidad Católica del área de Ciencias Económicas, llegó a ser el nexo entre la minera para la que trabajaba y el ex funcionario, figurando en el expediente, un viaje a Capital Federal para llevar una cifra millonaria.
El juez Julio Bavio, que entiende en la causa, dictó la prisión preventiva para Resnick, atento que consideraba que podría fugarse, ante la condena en suspenso que pesaba sobre él, y en su defecto tratar de influir en los testigos.
Hasta ahora no prestó declaración el ex titular de la Regional Salta de la AFIP. Se pudo conocer que algunos de los “beneficiarios” productores del norte provincial habrían brindado testimoniales.
En la causa se imputa los delitos de concusión, negociaciones incompatibles con el ejercicio de la función, defraudación a la administración pública, evasión fiscal, cohecho, coacción y desobediencia judicial.
Así percibían dinero de contribuyentes, generalmente en situaciones irregulares, con la promesa de dar una solución a su problema, la cual consistía en dejar de ser fiscalizados o bien en la obtención de resoluciones favorables y hasta hacer desaparecer causas tributarias.
Asimismo, también brindaban información reservada, valiéndose del mecanismo dispuesto por el Estado para investigar delitos tributarios y/o de trata de personas, el cual utilizaron en su beneficio para obtener dinero.
Durante el proceso, uno de los acusados generó situaciones de violencia moral hacia los testigos, a quienes entrevistó con el objeto de obligarlos a que depusieran su actitud y retiraran las denuncias formuladas en su contra.
El único detenido, al día de hoy es Resnick, ya que Fili, quien en un principio estuvo detenido obtuvo libertad sustitutiva.