El religioso fue acusado de tres hechos de abuso sexual, sobreseído en 2019 por el juez del Tribunal de Impugnación Nº 2, Adolfo Figueroa.
La información sobre la decisión de la Santa Sede fue suministrada por la parte querellante contra el sacerdote, el periodista Gerardo “Bafle” Montaldi.
Aguilera había sido denunciado por jóvenes de identidad reservada, por hechos de abuso que habrían sucedido hace 15 y 20 años, cuando estaba a cargo de la parroquia de la localidad de Campo Santo.
El Arzobispado de Salta no brindó la documentación solicitada por la fiscal, quien sostiene la pertinencia del cumplimiento de la medida.
La entonces fiscal penal 2 de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, María Luján Sodero Calvet, en el marco de la investigación que llevó adelante por dos denuncias de abuso sexual en contra de José Carlos Aguilera, informó que el Arzobispado de Salta no hizo lugar a la solicitud que realizara oportunamente de remisión de documentación vinculada a la investigación por denuncias en contra del sacerdote que se lleva adelante en el fuero eclesiástico. En respuesta, se indicó que debe solicitarla a la Santa Sede.
La fiscal sostuvo entonces la pertinencia del cumplimiento de la medida solicitada y citó la directriz de “tolerancia cero” contra los curas abusadores establecida por el Papa Francisco.
El juez Figueroa hizo lugar a un recurso interpuesto por el cura Aguilera, haciendo lugar “a la Excepción de Prescripción de la Acción Penal que fuera interpuesta por la defensa del señor José Carlos Aguilera”, y dictó “acto de sobreseimiento.
La Justicia desestimó una denuncia por amenazas interpuesta por Aguilera contra Montaldi. El religioso lo acusó por expresiones en medios periodísticos sobre las denuncias contra el religioso e incluso en un sitio de Facebook, donde pedía prisión para Aguilera por las acusaciones en su contra.