El profesional Daniel Dib detalló, ante el tribunal, lo que observó no solo en el cuerpo sino en la escena del crimen cuando llegó al motel, sorprendido porque la víctima tenía la cartera aún colgando de su hombro.
Además del profesional declararon ayer, dos efectivos policiales que estuvieron en la investigación del grave y violento suceso que terminó con la vida de la mujer de 39 años en el lugar del hecho. Resta conocer el testimonio de siete testigos, que se asegura estarán en la jornada de hoy, con lo que se dará por finalizada esta etapa, ya que mañana tras los alegatos se podría dar lectura a la sentencia.
Raúl Antonio Pérez de 41 años es juzgado por el delito de homicidio agravado por tratarse de femicidio.
El médico forense dijo que el 21 de septiembre de 2018 concurrió al motel donde ocurrió el hecho y observó el cuerpo de la víctima, que aún se encontraba en el suelo. Precisó que la mujer se encontraba vestida y señaló que un detalle que le llamó la atención fue que tenía la correa de la cartera apoyada en el hombro.
Acerca de las lesiones recibidas, el profesional afirmó que Jéssica González presentaba múltiples puñaladas en el esternón y en el tórax. También en la región axilar, abdomen y en las palmas de las manos (compatibles con acciones de defensa).
El médico sostuvo que la muerte se produjo en forma casi inmediata por las heridas punzocortantes que afectaron al corazón y a grandes vasos. El resto de las lesiones serían post mortem o con la víctima ya en agonía.
El testigo también se refirió a un informe suyo que figura en el expediente, relacionado con el estado del imputado, a quien examinó en el hospital en dos oportunidades para determinar si se encontraba apto para prestar declaración testimonial. Con respecto a las heridas que presentaba Pérez, manifestó que las lesiones en antebrazos tenían características de ser autoinfligidas.
Posteriormente, declararon dos efectivos policiales que estuvieron en el lugar realizando el secuestro de prendas de vestir y entrevistando a allegados de la víctima.
El tribunal está integrado por los jueces Roberto Faustino Lezcano (presidente), Norma Beatriz Vera y Maximiliano Troyano (vocales).
El hecho por el cual es juzgado Raúl Antonio Pérez ocurrió entre la noche del 20 de septiembre de 2018 y la madrugada del día siguiente, en el interior de un hotel alojamiento de la zona sur de la ciudad.
El cuerpo de Jéssica Norma González fue encontrado el 21 de septiembre en una de las habitaciones del establecimiento, con heridas punzocortantes.
El imputado permanecía en el mismo lugar, con lesiones de arma blanca autoinfligidas en el cuello y brazos, en todas estas audiencias, Pérez mantiene silencio, sin haber declarado o pedido disculpas a la familia, como algunos homicidas suelen realizar.
Detallan como fue apuñalada
“El cuchillo tenía una hoja de 15 cm”, señaló Daniel Dib, médico forense, en el programa "Toda La Verdad", que conduce el periodista Sebastián Rodríguez, por Radio FM Capital 97.7, advirtiendo que se trataba de un cuerpo con múltiples lesiones.
“Tres de esas lesiones fueron las más graves, ya que en la espalda y en el cuello tenía otras pero de menor valía, inclusive se observaba una en la cara que fue post mortem”, dijo.
Aclaró que una de las tres heridas, atravesó el corazón y otra el pulmón. Siendo estas las que causaron la muerte, ya que en una de ellas, atravesó la arteria coronaria.
“También se observaron cortes en las manos, lo que habla que la chica trató de defenderse”, señaló en la entrevista.
Dib resaltó la fuerza que se imprimieron a las puñaladas ya que existían fracturas costales.
En cuanto a las lesiones de Pérez, dijo que se trataba de lesiones que no acarrearon secuelas, y que en un mes se superaban, describió lesiones autoinfligidas en la zona de los brazos, y una en el estómago pero que no llegó a perforarlo