La misma jueza, Claudia Güemes, fue invitada para disertar sobre el "Derecho del niño a ser oído", en la II Jornada Nacional de Derecho de Familia que está prevista para el próximo 19 de octubre, y organizada por el Colegio de Abogados. Ayer, algunas versiones indicaban que la jueza dejó de ser disertante. En el Colegio de Abogados no hubo respuesta, aunque en horas de la tarde sí se retiró el anuncio de la jornada.
La abogada del padre de la nena, Natalia Bonetto, "como una señal que (desde el Colegio de Abogados), la van a apoyar pese a toda la persecución que está sufriendo", su representado.
El primer repudio vino desde la Fundación Volviendo a Casa desde donde se entendió que la participación de Güemes en el evento "es un acto de menosprecio y burla respecto los derechos de niños, niñas y adolescentes, ya que la violencia institucional que despliega diariamente respecto a quienes caen bajo su 'consideración' es inhumana y antijurídica".
Entendieron que con su actuar, la jueza violó los derechos de la nena de 5 años que suplicaba a llantos y gritos no ser separada de su padre. Para quienes componen la Fundación, con esto se violó el derecho de la nena a "ser oída", mientras la jueza aseguraba que ella era la autoridad y que la orden que emanaba debía ser cumplida.
Ante ello solicitaron que la magistrada sea excluida del panel.
Por su parte, Bonetto añadió que si bien en algún momento se había pensado en presentar un pedido de jury de Enjuiciamiento contra Güemes, "nos vimos muy solos". Ante ello decidieron realizar la denuncia en el Ministerio Público Fiscal, que quedó en manos de Justo Vaca. "Se han vencido los plazos de respuesta y el fiscal está aún en silencio", dijo Bonetto al sostener que Güemes fue denunciada por incumplimiento de funciones, prevaricato, abuso de poder y coacción agravada. Pero mientras el fiscal no responda, no se podrá hacer presentación alguna.
Vaca es el mismo juez que en solo dos meses encontró pruebas para requerir juicio contra la mujer que denunció al juez Federico Diez por violencia de género.
Persecusión
Bonetto aseguró que desde el momento que se presentó la denuncia contra Güemes su representado vive “una tortura”. Entre los ejemplos sostuvo que pese a la orden de una jueza (que no es Güemes), de evitar de manera transitoria el contacto de la nena con su madre por las denuncias que esta tenía de ejercer violencia, una fiscal, Siemensen de Bielke, decidió imputar a su representado por impedimento de contacto.
Cuando el caso fue tomado por otra fiscal, con el pedido de sobreseimiento del padre de la nena de por medio, se indicó que en realidad no se podía seguir adelante con la acusación. Pese a ello, se sigue con dilaciones para resolver la cuestión.
