En la zona de Santa Victoria Este, el crecimiento del cauce del Rio Pilcomayo ha causado desbordes que han obligado la evacuación de familias, pese a que autoridades de Asuntos Indígenas, aseguraron a Nuevo Diario que la crecida “no afectaría a las comunidades”.
En el caso de Misión La Paz, Alejandro Garcia, delegado del Consejo de Participación Indígena del INAI por el pueblo chorote, informó a este medio que las comunidades han quedado aisladas por los desbordes que tuvo el rio.
“Siempre quedamos aislados todos los años, acá no se hicieron obras en los sectores críticos como se debía hacer, estamos muy preocupados” sostuvo el dirigente chorote.
Misión La Paz es un paraje fronterizo con la Republica de Paraguay y la Provincia de Formosa, separados por el Pilcomayo.
Según indicó Garcia, en el sector paraguayo se han hecho importantes obras para contener la crecida del rio, por lo que causa un efecto rebote que impacta de lleno en el sector argentino.
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Ese efecto produce que en el sector argentino el rio desborde y corte las rutas de acceso a Misión La Paz. Además las empresas telefónicas argentinas no cubren el sector, por lo que los habitantes de la zona deben contratar el servicio de una empresa paraguaya para tener algo de conectividad.
“Por estos motivos nosotros no nos enteramos si la Provincia ha enviado alguna asistencia, nos vamos enterando de a poco lo que sucede”, aseveró Garcia. El delegado chorote criticó que el aislamiento se generé porque nunca se hizo hincapié en obras que eviten el corte en los acceso y posibiliten a los habitantes salir durante las crecidas.
“Hace falta muchos puentes”
Por otro lado, Garcia comentó a este medio que el rio ya ha roto defensa de los anillos de contención causando que ingrese agua a otras comunidades de la zona.
Según publicó la Subsecretaría de Defensa Civil de la Provincia, junto con la Secretaría de Recursos Hídricos, se realizan monitoreos y relevamientos en la zona para reforzar los anillos de contención para evitar posibles filtraciones.
“Estimamos que hasta el día 3 de febrero vamos a tener el caudal del río a un nivel elevado, por lo que realizamos este monitoreo hora a hora para determinar las necesidades de las comunidades” afirmó Jorge Arce, subsecretario de Defensa Civil.
Por su parte Garcia expresó que “el rio está bajando muy poco” y que en lo que respecta al anillo de contención que los rodea “la corriente golpea fuerte pero parece controlado”.
También se registró que el rio está a punto de llevarse una casa perteneciente a la empresa Evaluación de Recursos S. A., encargada del control del caudal del río, lo que podría afectar las mediciones.
“Estamos atentos a lo que el golpe del agua pueda causar”, sentenció Garcia.
