Una jornada no laborable implica que las empresas privadas tienen la libertad para darle asueto o no a sus empleados a lo largo de una determinada fecha. A diferencia de un feriado, es una decisión que queda en manos del empleador.
El lunes 8 será un día no laborable con fines turísticos. Quiere decir que los empleados podrán tener el día libre o no de acuerdo con la consideración de cada empresa.
Si la necesidad del empleador determina que sea un día laborable, los trabajadores que presten servicio recibirán el jornal de un día común como cualquier otro, como sucedió con el Jueves Santo.
La diferencia entre un feriado y un día no laborable lo aclara la Ley de Contratos de Trabajo: "En los días feriados nacionales rigen las mismas normas legales que sobre el descanso dominical", por lo que "en caso de ser trabajado se recompensará con un 100 por ciento más la remuneración habitual". Mientras, en los días no laborables "el trabajo será optativo para el empleador", salvo en la administración pública nacional, provincial y municipal.
En este caso, el feriado del 8 de julio no será fin de semana largo.
En lo que resta del año vale destacar que septiembre carecerá de feriados. En tanto, las fiestas de fin de año (24, 25, 31 de diciembre y 1 de enero) caerán martes y miércoles.