Ante el recorte de subsidios al transporte por parte del Gobierno nacional, los estudiantes se vieron gravemente afectados. Además del aumento del boleto, que vale $490, la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT) emitió fuertes restricciones al pase libre estudiantil.
Entre esas medidas, dictaminaron que las autoridades de las instituciones educativas debían enviar un listado con datos privados y académicos de los estudiantes. Sin embargo, la Universidad Nacional de Salta (UNSa) rechazó este pedido, por el carácter privado y de protección legal de los datos, y envió los padrones como se hacía habitualmente a partir del 27 de febrero. La empresa se negó a aceptar los padrones y la renovación no se inició de forma oficial.
Las instituciones de educación superior se vieron afectadas en su inicio de clases y cerca de la mitad de los estudiantes comenzaron su cursada el 11 de marzo, sin contar con el pase libre. Se estima que los afectados son alrededor de 25.000 alumnos.
Ante esta situación, se llevó adelante la movilización ayer al mediodía en las puertas de SAETA, con estudiantes de diversas instituciones, agrupaciones estudiantiles y autoconvocados.
"Nos dirigimos hasta SAETA para que se dé marcha atrás con estas restricciones absurdas que no tienen análisis previo y se habilite el boleto gratuito, como así lo ampara la ley provincial", expresó Noelia Salinas Ponce, presidenta del centro de estudiantes de Ciencias Naturales
Los estudiantes exigieron ser parte de las mesas de diálogo que existirían entre la Universidad, la AMT y el Gobierno provincial.
"Lo único que sabemos es que no hubo una respuesta favorable por parte de las empresas ni del gobierno provincial para tratar de solucionar este problema", informó Lautaro Cabrera, presidente del centro de estudiantes Humanidades.
Respuesta de SAETA
Ante el reclamo estudiantil y de manera informal, SAETA difundió que los estudiantes pueden realizar la renovación asistiendo a las oficinas, sin turnos, con fotocopia de DNI e historia académica que contenga dos materias finalizadas en el último año.
Sin embargo, la información no fue divulgada en los medios oficiales de la empresa y empezó a circular en grupos de whatsapp de estudiantes desde la noche previa a la movilización, lo que Noelia Ponce, presidenta del centro de estudiantes de Ciencias Naturales consideró "un manotazo de ahogado" para evitar el reclamo.
El estudiantado consideró que es inviable hacer el trámite de forma presencial, entendiendo que se estima una totalidad de 60 mil estudiantes que deberían acercarse a las oficinas para habilitar sus tarjetas.
