Atento a los reclamos planteados por un grupo de enfermeros profesionales que cursaron la carrera de licenciatura en enfermería en la Universidad Maimónides con sede en el Instituto Dr. Ramón Carrillo de la provincia de Salta, la asociación de trabajadores de la sanidad, a través de su secretario gremial Hugo Herrera, aclaró puntos fundamentales al respecto. Se trata de una situación que, a decir de la misma institución, no solo perjudica a los alumnos que cursaron esta carrera -porque les impide recibir el título que lograron con mucho sacrificio y dedicación-, sino que además les impide matricularse y así lograr el cambio de agrupamiento soñado, que fue quizás el objetivo fundamental de haber iniciado el cursado de esta carrera.
Las manifestaciones realizadas por los damnificados, en algún momento, llegaron a poner en duda la validez de la carrera de esta universidad en la delegación Salta, lo que, a decir de la entidad gremial, no es del todo cierta y estaría motorizada por otros intereses “que intentan poner un manto de dudas y sombras” en un sistema de capacitación modelo para esta zona del país.
Consultado por Nuevo Diario, Herrera reconoció los reclamos y señaló que: “de acuerdo a los informes que nuestra institución requirió y recibió por parte del Instituto Dr. Ramón Carrillo oportunamente, el reclamo de la mayoría de los alumnos está contemplado como algo real y es algo que desde esa institución ya fue explicado a los mismos, y desde hace un tiempo se viene trabajando con autoridades de la casa de altos estudios en Buenos Aires sin que a la fecha se haya logrado una respuesta satisfactoria”.
Sobre las graves acusaciones de estafa, el secretario gremial negó rotundamente los cargos y sostuvo: “Desde nuestra asociación comprendemos la reacción emotiva de cada uno de ellos, pero de ahí a catalogar como un fraude este sistema de capacitación, hay una injusticia muy grande de por medio. Porque, primeramente, la palabra fraude está catalogada como ‘un engaño económico con la intención de conseguir un beneficio’, algo que para nada se ajusta a esta situación, por cuanto si nos remontamos al objetivo fundamental del dictado de esta carrera, nos vamos a dar cuenta que todo lo que se hizo siempre fue pensado en favor de los trabajadores. Si hablamos de horarios de cursado, ellos saben que siempre fueron adaptados a sus realidades. Si nos detenemos en la organización, la universidad llegó a todos los departamentos cabeceras de la provincia mucho antes que cualquier otra universidad. Si hablamos de rédito económico, nunca hubo, por cuanto el costo de la cuota siempre fue mucho menor que el que cobra esta universidad en cualquier parte del país e, incluso muchas veces, los costos de los incrementos que marcaba Maimónides fueron absorbidos por esta entidad gremial. Si hablamos de los años que trabajamos en conjunto y de la cantidad de alumnos recibidos y que hoy gozan el beneficio de ser licenciados en enfermería, entonces, ¿de qué ‘fraude’ estamos hablando?”, concluyó.
¿Dónde están los títulos?
Al respecto, el secretario gremial de ATSA aseguró: “Nosotros como entidad gremial estamos tanto o más preocupados que los directos damnificados, porque se trata de afiliados nuestros que hoy no tienen una respuesta a sus reclamos, sabemos que hay irregularidades, pero la irregularidades provienen de una universidad que a la fecha no supo dar las respuestas que necesitamos. Desde hace un tiempo que esta asociación viene trabajando en este sentido; prueba de ello es el estudio jurídico que se contrató para que accione contra quien tenga que accionar y de esa manera podamos resolver este problema. Desde el inicio de este sistema hemos colaborado en la entrega de 2.000 títulos a licenciados en enfermería y no vamos a parar hasta garantizar que se entregue el último título pendiente”. Asimismo aseguró que hay gente que busca “sacar rédito político de esta situación”.
