Se trata de una iniciativa de Grobert Nogales Grageda, Santos Mamani Espinoza y Gualberto Arispe Maita. En una carta dirigida al Comité Nobel Noruego, los tres definieron a Fernández como “un jurista que siempre estuvo comprometido con la causa y la práctica de los derechos humanos en la Argentina y en América Latina” y sostuvieron que “su actitud decidida y valiente permitió salvar la vida del ex presidente Morales Ayma y del ex vicepresidente Álvaro García Linera”.
Persecución
“Esta actitud también permitió la recuperación de la institucionalidad democrática y poner fin a la persecución que sufrieron los pueblos originarios durante el Golpe de Estado que ocurrió el 10 de noviembre de 2019”, agregaron.
Morales renunció aquella fecha en medio de una fuerte crisis política y social desencadenada por un informe de la OEA que reveló presuntas irregularidades que no fueron confirmadas en las elecciones generales realizadas un mes antes y se asiló en México, invitado por Andrés Manuel López Obrador. Por aquel entonces, este último y Fernández “acordaron extremar los esfuerzos para que Morales y sus colaboradores pudieran salir de Bolivia”, donde “estaban resguardados de un grupo irregular” que los buscaban y “temían por sus vidas”, repasaron los legisladores. Previo a su aterrizaje en Argentina, el ex presidente boliviano viajó a Cuba para una consulta médica, según informó Graciela Montaño, quien fuera su ministra de Salud y quien luego también lo acompañó a Buenos Aires. Sin embargo, los detalles de su estadía en La Habana se mantuvieron bajo total reserva hasta que recientemente el propio Morales admitió: “Cuando yo fui a Cuba no fue por temas de salud, fui a una reunión de planificación con Cuba y Venezuela, una reunión de alto nivel a ver cómo retomábamos la democracia”.
Evo Morales arribó al país el 12 de diciembre de 2019. Lo hizo junto a su ex canciller, Daniel Catalano -sindicalista de ATE- y Guillermo Justo Cháves, jefe de Gabinete de la Cancillería
Al enumerar los argumentos de la postulación al Nobel, los legisladores bolivianos también refirieron a los libros dedicados a los DDHH bajo la autoría del presidente argentino y subrayaron su gestión como jefe de Gabinete durante las presidencias de Néstor y Cristina Kirchner, entre 2003 y 2008.