Los jueces de la Sala IV, Roberto Faustino Lezcano, Norma Beatriz Vera y Maximiliano Troyano, darán la oportunidad al acusado de emitir sus palabras finales. Hasta ahora nunca declaró Pérez, ni al momento de ser imputado, ni durante las audiencias.
Ayer desfilaron los últimos testigos, Pedro Pérez, hermano del acusado; Rodrigo Sánchez; oficial Cristian Naranjo; Nicolás Arias Gómez, psicólogo que tuvo a su cargo la pericia psicológica de Raúl Pérez; Alejandra Guinudinik, bioquímica del CIF que tuvo a cargo el análisis de los perfiles genéticos encontrados en la escena del crimen y en los cuchillos secuestrados; Paola Elizabeth Geipel y Cristian Fernando López, ambos del departamento de Criminalística del Cuerpo de Investigaciones Fiscales.
Hoy a partir de las 8 se iniciará la audiencia final en la Sala de Grandes Juicios de la Ciudad Judicial de Salta.
La parte acusadora tendrá la oportunidad de abrir la etapa de alegatos, y de mantenerse la carátula de femicidio, es de suponer que pedirá la pena mázima que sostiene 35 años de prisión.
La querella representada por los abogados Marcelo Arancibia y Fernando Teseyra, se especula, adherirán al pedido de la fiscal María Luján Sodero.
Por su parte, el defensor Juan Domingo Erazo, podría insistir en una merma de la pena, si interpusiere la emoción violenta ante su postura de mantener que no había entre ambos una relación sentimental.
Así al menos declaró, oportunamente, el defensor en varias oportunidades cuando señalaba: “Ninguno de los testigos manifestó que había algún tipo de relación entre ellos, a pesar que haya pretendido tener algún acercamiento. Ellos se conocían, sí. Y tenían una amistad por la Iglesia”.
El hecho por el cual es juzgado Raúl Antonio Pérez ocurrió entre la noche del 20 de septiembre de 2018 y la madrugada del día siguiente, en el interior de un hotel alojamiento de la zona sur de la ciudad.
El cuerpo de Jéssica Norma González fue encontrado el 21 de septiembre en una de las habitaciones del establecimiento, con heridas punzocortantes. El imputado permanecía en el mismo lugar, con lesiones de arma blanca autoinfligidas en el cuello y brazos.
Tres años por estupro
Roberto Exequiel González de 19 años, fue condenado por el juez Ángel Longarte a la pena de tres años de prisión de ejecución condicional por el delito de estupro. La víctima era hija de un ex compañero de trabajo.
Durante el tiempo de la condena, el joven deberá fijar residencia y someterse al cuidado de un patronato. Además tiene prohibido acercarse a 300 metros de la menor víctima, y de contactarse con ella por cualquier medio de comunicación.
Se remitirá, una vez firme la sentencia, una copia del fallo condenatorio a la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA), junto con una revisación médica exhaustiva de González, sus fichas dactilares y tomas fotográficas de conformidad a lo establecido en las Acordadas 12481 y 12641 de la Corte de Justicia.