La jueza federal con competencia electoral de la ciudad de Buenos Aires, María Servini de Cubría, habló sobre las demoras por la votación electrónica y dijo que la elección concurrente "viene mal". En declaraciones a medios nacionales sostuvo que hay más de 200 maquinas sin funcionar.
Servini además advirtió que "resulta preocupante el grado de improvisación" en el manejo de las máquinas de votación electrónica para votar jefe de Gobierno porteño y cargos locales. Según sus declaraciones, "Hay alrededor de 240 urnas sin abrir. Algunas máquinas prenden, pero no imprimen; otras no andan directamente; y en otras hay gente que no las sabe arreglar".
Nuevo Diario recorrió las escuelas en Capital Federal, y pudo cotejar que existían demoras en la votación vía electrónica, no por desconocimiento de los votantes, como se estimaba inicialmente sino por problemas en el funcionamiento de las máquinas: el clásico “tildado”, o bien la no impresión de la boleta.
En ese marco y mediante una nota enviada al presidente de la Cámara Nacional Electoral, Alberto Dalla Vía, Servini alertó sobre la "improvisación con que se han manejado tanto la empresa contratada para la provisión e instalación de máquinas de votación como el propio Instituto de Gestión Electoral de la Ciudad de Buenos Aires, evidenciando una impericia nunca antes vista en la realización y ejecución de un proceso electoral, en entidades que parecen más preocupadas por analizar lo que demora cada elector en votar, pretendiendo inventar mecanismos para que pueda haber dos electores votando a la vez en cada mesa, en lugar de gestionar eficientemente los recursos para que los electores puedan votar".
La magistrada reportó problemas de funcionamiento hasta bien entrada la noche del sábado, en tanto que al inicio de la jornada de votación de este domingo las máquinas no funcionaban en al menos tres centros de votación porteños. "Pienso que se pueden postergar las elecciones en CABA", confesó Servini.
En esa misma línea, la jueza detalló que en algunos locales de votación las máquinas no "habían sido conectadas ni probadas" y "en muchos locales no estaban los kit de instalación" y algunas máquinas "directamente no funcionaban" o con cableado suelto, lo que podría poner en riesgo la seguridad de los votantes. "Se estima que aproximadamente un 30% de las máquinas estarían en esa situación", agregó.
Por estas horas se analiza la posibilidad de extender el horario de votación en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hasta las 19.
Servini está a cargo de los comicios nacionales y locales en CABA, donde confluyen los dos sistemas de votación: el tradicional y las mesas con voto electrónico.
"No puedo hacerme responsable por las situaciones descriptas ni por sus posibles consecuencias, al no haber sido generadas por el accionar de este tribunal", dijo la jueza.
