De esta manera, el gobernador jujeño tomó la decisión de vuelta a fase 1 en Jujuy, Yala, Palpalá y Perico durante 7 días, y descartó que hasta el momento exista circulación comunitaria del virus en Jujuy.
Tras las expectativas puestas en el encuentro entre los mandatarios, en el marco de los actos conmemorativos por el 199 aniversario del fallecimiento del General Güemes, finalmente la reunión se vio frustrada, con la preocupación de Morales por los casos positivos en la vecina provincia durante las últimas horas.
La medida tomada de retorno a Fase 1, se extenderá por una semana, lapso durante el cual se buscará determinar los contactos directos que habrían mantenido las nuevas personas infectadas.
Se trata de dos hermanos -una mujer que trabaja en la localidad de Perico y un policía, que habría estado en diversos lugares en el marco del cumplimiento de sus funciones.
Los dos se habían presentado por su cuenta en una clínica, acusando síntomas. Entre otras labores, el agente se desempeñaba como guardia en la Legislatura de esa provincia y, en el marco de las medidas sanitarias por la COVID-19, tomaba la temperatura a los que ingresaban.
Debido a todo esto, el Comité Operativo de Emergencia de esa provincia consideró necesario dar marcha atrás con todas las flexibilizaciones que habían habilitado solamente para lo que denominó “Gran Jujuy”.
“Será para toda la actividad pública, la actividad judicial, y todo tipo de actividad habilitada hasta el momento en el área metropolitana”, dijo el gobernador.
“Solo abastecimiento durante siete días”, dijo Morales, quien subrayó que es el mismo criterio que se utilizó en Fraile Pintado y Calilegua. “Los que hayan tenido contacto, que se vengan de inmediato al hospital de campaña”, pidió Morales, quien mencionó que hay gente que ya fue hisopada y se espera el resultado de los test PCR.