De este modo, los millones de electores y electoras de todo el país tendrán en sus manos la posibilidad de elegir entre el candidato que promueve UxP, Sergio Tomás Massa, quien decidió no sólo tomar la “papa caliente” de una economía en rojo, de un desgastado gobierno, por pandemia, por sequía, por guerras, y por los fuegos amigos; sino que se erigió como la figura dentro del peronismo, que promueve además de sus intenciones presidencialistas, “poner el fin de la grieta”, y profundizar en políticas públicas.
En su contra juegan el derrotero de una inflación que no logró apagar, entre los principales reclamos, pero acaso a su favor, la propuesta de “centro y centrada” de un llamado a la unidad nacional, del que se hicieron eco numerosos referentes políticos de distintos sectores, durante las últimas semanas, puede resultar finalmente su carta fuerte.
Del otro lado, la propuesta que enarbola Javier Gerardo Milei y sus postulados liberales extremos, representan un salto a lo desconocido, que quedó demostrado en las PASO, un gran porcentaje de los argentinos y argentinas, están dispuestos a dar.
Y es que a la sombra de pandemia, guerras, sequías y conflictos internos, Milei supo capitalizar en sus redes (personales y sociales) el malestar, activar la categoría “anti”, que incluye las propuestas políticas negacionistas que desde hace años subyacen en el gen argentino, y que marca la intolerancia creciente; y finalmente reactivar las recetas antiguas del éxito liberal, sobre todo de la mano de la idea de la dolarización. Sin olvidar, que a este tren “anti”, durante los últimos días se sumó el macrismo, como para fortalecer la idea de una derecha instalada en todas sus fauces.
La de este domingo, no es una elección más, y es por ello fundamental comprender e identificar modelos de ser, hacer, vivir, convivir que se ponen en juego, y que por estas horas todavía tienen un final abierto.
Incertidumbre económica
La incógnita del resultado plantea grandes dudas respecto de qué sucederá con la economía nacional a partir del lunes (que es feriado, pero ya empezarán a verse señales en el mercado).
“Para el peso, la renta fija y las acciones de bancos el mejor escenario es Massa, dado lo disruptiva que es la propuesta de dolarización. Es impensable que el dólar Contado con Liquidación (CCL) se mantenga en los niveles actuales si la dolarización es una contingencia probable, es difícil imaginar una operación de canje en la que los bonos en pesos puedan ser convertidos a bonos en dólares sin pérdidas de capital y luce improbable que los balances de las entidades financieras salgan indemnes de una transacción así”, consideran desde la consultora 1.816. Mientras que para las acciones no bancarias, el mercado parece preferir a Milei, a juzgar por lo que fue la evolución de la renta variable desde las PASO.
No obstante, gane quien gane, se inicia una nueva etapa, marcada por la necesidad, entre otras, de equilibrar el mercado cambiario y resolver los desbalances en los precios relativos, dos elementos que obligan a modificar la política económica.
