En un comunicado que envió en horas de la mañana a los medios, la funcionaria indicó que "los jubilados salteños merecen del cuidado de sus derechos por encima de cualquier otro interés creado". Ello, pese a que la situación que se vive es, justamente, la falta de atención.
Moisés puso en duda los intereses de los legisladores y los cuestionó indicando que podrían haber sido movilizados "por los intereses de un pequeño grupo de médicos fisioterapeutas y propietarios de clínicas".
Apuntó a las sobrefacturaciones (en investigación del Ministerio Público Fiscal Federal), al indicar que "durante años el PAMI fue centro de beneficio para muchos prestadores que agrupados en pequeños círculos médicos, realizan fuertes lobbys que buscan el máximo de su beneficio. No les mueve la búsqueda de un mejor servicio y mayor cuidado hacia los jubilados. Estos lobbys, esconden también los espacios que la complejidad de la institución, con enormes cantidades de prestaciones que cada mes se abonan hace a la dificultad de un control estricto en las rendiciones que se presentan para el cobro".
Indicó que "la práctica de sobre-facturar prestaciones existe. Y es esta práctica la que genera la razón del cambio del sistema de pago a un sistema de pago por cápitas, que es utilizado por muchísimas organizaciones de prestación médica no sólo en Argentina sino en el mundo. El pago por contratos por capital, termina con estas malas prácticas de sobre-facturar, brinda previsibilidad sobre el gasto médico, el prestador también obtiene previsibilidad sobre su cobranza mensual y el afiliado una atención más dedicada".
"Que audite"
Federico Aguilar, uno de los kinesiólogos que protestó contra el PAMI en contra del sistema capitado, sostuvo que en caso de haber sobrefacturaciones Moisés debería primero hacer una auditoría y acusar.
"Entre quienes nos conocemos sabemos que entre los que recientemente firmaron por el sistema capitado (y que son entre 15 y 20 fisioterapeutas), con la obra social, estarían quienes sobrefacturan", dijo Aguilar. Agregó que se debe entender que muchos de los que sobrefacturaban, además, eran del Interior de la provincia y que lo hacían porque al no haber otras obras sociales privadas nadie solventaba el pago por zona.
Más allá de esa situación, indicó que de todos modos se dejó a cerca de 100 trabajadores de la Salud sin ingreso (pese a que muchos cumplían con lo establecido con el PAMI).
La situación no es mejor para los jubilados, que siguen con este servicio suspendio (necesario para muchos).
