De la recorrida participaron los presidentes de ambas comisiones, el diputado Bernardo Biella y el senador Manuel Pailler; los diputados, Osbaldo Acosta, Gladys Paredes y Ramona Riquelme; y los senadores Carlos Rosso, Sonia Magno y Carlos Ampuero.
En ese marco, los legisladores fueron recibidos por el gerente, Julio Roberto Garzón, quien brindó un informe sobre el estado del hospital en cuanto a su infraestructura, equipamiento y recursos humanos.
Garzón agradeció el interés de la comisión en las necesidades del hospital y dijo que en la recorrida se mostraron virtudes y defectos, con la idea que las mejoras que fueron planteadas sean en beneficio de la gente.
Los diputados y senadores precisaron que ambas comisiones consensuarán un documento que será girado al Ministerio de Salud Pública para avanzar en las gestiones necesarias para las mejorías, puesta en valor y reacondicionamiento del nosocomio.
Las condiciones del establecimiento público no son desconocidas, ya que cabe recordar que hace un mes se cayó una parte del techo de tejas de la sala de reumatología del citado nosocomio, ello debido a la antigüedad del mismo según indicaba entonces el director Garzón, que solicitaba de manera urgente la intervención del Ministerio de Salud para las correspondientes mejoras.
Garzón señaló entonces a este medio que la estructura antisísmica no tiene la resistencia de antes, por lo que cualquier movimiento que se genere puede traer consigo considerables daños. El tránsito de los vehículos por la calle hace que las paredes se vean afectadas.
Por este motivo, Garzón había remarcado la necesidad de que se refuncionalice la estructura general del lugar, donde habría que demoler algunos sectores advirtiendo que, en el presente, no se cumplen con las condiciones de un hospital de referencia como debería ser. Se trata de un hospital de alta concurrencia, en cuya guardia se atienden al menos a 160 pacientes por día sin tener las condiciones apropiadas.
