Fue el presidente del Ente Regulador de los Servicios Públicos de la provincia, Carlos Saravia, quien informó a Nuevo Diario acerca de los detalles de estos aumentos. En relación a la Empresa EDESA, “lo que hemos hecho es avanzar con un rechazo de lo que era la petición originaria de un incremento del 75%, y hemos planteado respetar el límite establecido a lo que es el 50% de lo que se otorgue en paritarias salarial para los empleados de la administración pública provincial; por eso es que el incremento va a ser escalonado, para evitar impactos fuertes, esto es un 25% que se da en septiembre que va a impactar directamente en las facturas que llegan a las casas en el mes de octubre, 12,5% y 12,5% para los meses de noviembre y diciembre, que llegan como impacto concreto en los meses de diciembre y enero. Para este caso, se resolvió preservar con tarifa social a 135 mil usuarios aproximadamente, que van a tener una readecuación tarifaria que equivale a la mitad de la tarifa de los usuarios residenciales, es decir, 12,5% y 6,25% en los periodos señalados”, pormenorizó el funcionario provincial.
En el caso de Aguas del Norte, Saravia informó que se rechazó el planteo por el cual pedían un reconocimiento por mayores costos del 247,08%: “ellos planteaban el incremento acumulado en relación a los costos desde marzo del 2.021 hasta mayo de 2.023. Durante ese período, el gobierno provincial les ha reconocido a los empleados públicos 302% de incrementos, consecuentemente nuestro tope es la mitad. El problema es que el servicio sigue siendo deficiente y estamos planteando un proceso de recomposición tarifaria y de convergencia de esas tarifas, pero también que exista una mejoría de la operatividad del servicio”, reclamó.
Explicó que para el caso del agua se han dispuesto distintos tipos de incrementos: “el que tiene menos capacidad, paga menos, y esto se corresponde con las zonas donde residen. La zona 1 es la céntrica y la más representativa, y que alcanzaría aumentos de hasta 6 mil pesos en una boleta promedio. La zona 2 de medianos recursos, podría alcanzar un aumento promedio de 3 mil pesos, en tanto que la 3, de menores recursos, podría tener un aumento de hasta 600 pesos”.
Un esfuerzo compartido
“Lo que se ha buscado es un esfuerzo compartido y que el que más tiene pueda asumir mejor lo que son los impactos lógicos frente a la necesidad de recomponer los costos en base a la facturación. Lo que se intenta también es que haya sostenibilidad en las empresas de servicios públicos, porque lógicamente el proceso inflacionario no solamente castiga al usuario sino también al que presta el servicio”, señaló Saravia a este medio.
Cabe recordar que ayer se conocieron cinco resoluciones del Ente: dos tienen que ver con la creación formal de las tarifas sociales, una del servicio de energía eléctrica y otra vinculada con el agua potable, y el resto tiene que ver con la necesidad de atenuar los impactos de las subas de servicio, en el medio de un contexto apremiante en lo económico por lo que es el proceso inflacionario, la suba de costos y, sobre todo, la suba de la canasta familiar.
