En diálogo con Radio Nacional, una de las integrantes de la Asamblea de Autoconvocados por el Agua Sana afirmó que el líquido que llega a los domicilios tiene niveles altos de boro y arsénico.
Se trata de un reclamo que lleva más de una década sin soluciones, y numerosas presentaciones en los distintos entes y organismos locales y nacionales.
Cabe recordar, que desde el año 2014 existe una resolución vigente y que establece que la empresa debe proveer a la población de agua apta para el consumo humano, y modificar en un término de dos años la captación del agua, sin embargo, esto no se hace efectivo.
En la búsqueda de soluciones, la asamblea se reunió en el mes de abril, con autoridades del Ministerio de Infraestructura, además de mantener un encuentro con Carlos Morello, director del Ente Regulador de Servicios Públicos. Todos los presentes se comprometieron a poner a disposición de las y los vecinos camiones de agua apta para el consumo, promesa que tampoco se cumplió.
De igual manera, y en el afán de arrancar compromisos, las familias convocaron a la senadora provincial Sonia Magno quien concurrió a algunas asambleas y se comprometió a poner la problemática en agenda. Asimismo, se reunió con autoridades del ENOHSA- Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento- con quienes el intendente habría firmado acuerdos de los que poco o nada se sabe.
Lo cierto es que el petitorio para la ministra Vizzotti resulta más en un grito desesperado, que los vecinos aguardan llegue a buenas manos.
