La medida comenzará a regir para las asignaciones familiares que se perciban durante septiembre próximo.
A las críticas de los dirigentes enrolados en el llamado peronismo "racional", en el que están el gobernador Juan Manuel Urtubey, Diego Bossio, Sergio Massa y el senador nacional Miguel Ángel Pichetto, entre otros, se agregó ayer la bancada del PJ que calificó la medida como "un nuevo atropello contra la equidad federal", dado que se recortan la mayoría de las asignaciones familiares en zonas desfavorables.
Con la firma de Pablo Kosiner, titular del bloque, se criticó el decreto y se pidió "el Presidente se ocupe de una buena vez de los problemas reales en lugar de dedicarse permanentemente a golpear el bolsillo de los trabajadores".
El gobierno achicó el techo o tope máximo de ingresos aplicables a los beneficiarios de asignaciones familiares, que bajó de $ 94.786 actuales a $ 83.917.
La nueva normativa establece que si uno de los integrantes del grupo familiar tuviera un ingreso superior a los $41.959, quedará excluido del cobro de las asignaciones. Antes, el salario máximo para un integrante era de $47.393.
Además, eliminó los beneficios extras para más de 100.000 chicos de la Patagonia y del norte, que cobraban más que el resto del país.
