En COPAIPA, el espacio macrista realizó una presentación de su balance de trabajo legislativo durante el último año.
El bloque de concejales capitalinos que conforman Gauffin, Agustina Álvarez y Pablo López, junto a la diputada provincial Sofía Sierra, expusieron a lo largo de dos horas el trabajo ejecutado desde sus espacios.
También la legisladora nacional saliente, Virginia Cornejo, expuso el trabajo realizado en la instancia nacional donde integró el interbloque de Juntos por el Cambio.
Cornejo, una de las oradoras finales, sostuvo la necesidad de que su fuerza pueda fortalecer su espacio superando la instancia de solo alcanzar bancas legislativas, apuntando los cañones a ocupar espacios ejecutivos en la provincia.
El partido amarillo considera que hay retrocesos en la institucionalidad del estado, apuntando a los gobiernos peronistas como causantes de ello.
“Creo que hay una enorme deuda que está dejando el justicialismo en su gobierno en la calidad institucional de la provincia. Y ese es el desafío del PRO Salta. El de construir a mejorar la calidad institucional”, afirmó el legislador Gauffin.
El futuro de JxC y el PRO
La fuerza que representa Gauffin tuvo un quiebre a raíz de la decisión de la conducción del PRO a nivel nacional de acompañar a Javier Milei de cara al balotaje.
El visible quiebre que afronta el frente con la Unión Cívica Radical es considerada como una oportunidad por el espacio salteño para afrontar un proceso de normalización de su espacio.
“El resultado de la elección del próximo domingo va a generar un reordenamiento general en el país en lo político. Y Salta no va a estar exento de eso. Creo que es la oportunidad del PRO para crecer definitivamente. Las sucesivas intervenciones no han permitido esto, así que aspiro a que haya un proceso de regularización institucional del PRO que nos permita crecer”, dijo de manera crítica el diputado.
El partido amarillo atraviesa desde 2019 un proceso de intervención desde el partido nacional a raíz del desorden institucional del territorio salteño.
La línea que encabeza la última conducción elegida por el voto de los afiliados, Martín de los Ríos y Alberto Castillo (hoy funcionarios provinciales), no cuentan con el aval nacional para conducir el PRO local debido a la cercanía del oficialismo provincial con la bandera política de Unión por la Patria.
Por ello, se han establecido distintos interventores evitando el llamado a elecciones.
Con pronto vencimiento, la intervención que encabezan Alejandro Ávila Gallo (del sector de Bullrich) y Antonio Demarco (del sector de Larreta) tiene los días contados por lo que se espera un nuevo interventor en el territorio provincial.
Gauffin advierte que esta persona lejos de tener un mandato de una de las dirigencias nacionales, se espera que sea un perfil de carácter administrativo cuyo fin sea normalizar el partido.
“Yo calculo que la regularización no tiene que pasar más allá del primer semestre del año que viene. Como todo afiliado, en lo particular a mí me interesa trabajar por ese fortalecimiento del PRO, sin ninguna duda”, aseveró el legislador.
Y añadió: “Tiene que ser una persona que venga a cumplir un rol totalmente administrativo. El de permitir un amplio proceso de afiliación. El de poner un calendario electoral claro y llevar adelante ese proceso electoral. Tiene que ser alguien equilibrado y centrado en esa actividad”.
Este proceso se hará en medio del recambio dirigencial que también el PRO deberá afrontar, dado que el mandato de Patricia Bullrich también tiene vencimiento en febrero próximo.
La única certeza que sostienen desde el espacio amarillo es que la nueva conducción debe estar centrada en su rol opositor, cerrando la puerta a que las figuras que iniciaron el PRO salteño regresen al partido en su próxima etapa.
