La fallecida, de 63 años, sería una de las propietarias de Godoy Joyerias y según el testimonio de su cónyuge, la mujer se habría suicidado de un disparo.
La Policía confirmó que en el deceso de la sexagenaria estuvo involucrada un arma de fuego que se encontró en la escena.
La fiscal Poma se hizo presente en el lugar y coordinó el trabajo de personal de Criminalística, de Informática y de personal médico del CIF.
El cuerpo fue trasladado al Servicio de Tanatología Forense del CIF, donde se realizará la autopsia para determinar data y causa del fallecimiento.
Mientras, miembros de la policía custodian el negocio familiar ubicado en calle Caseros esquina Ituzaingo para preservar la escena.