Eramet, la minera francesa que opera el salar Centenario-Ratones en la provincia de Salta, anunció que empezará a producir, en una primera etapa, 24.000 toneladas de carbonato de litio equivalente (LCE), lo que proporcionará alrededor de 600.000 baterías para autos eléctricos.
Según comunicó la compañía, se dará inicio a las operaciones durante el segundo semestre de 2024.
La minera francesa opera el salar junto con la empresa de capitales chinos, Tsingshan.
El medio especializado EconoJournal, informó que la inversión total de construcción será de u$s 800 millones (anteriormente habían anunciado un desembolso de u$s 735 millones pero, dada la volatilidad macroeconómica local, la empresa ajustó su presupuesto). Tsingshan financia aproximadamente u$s 480 millones.
La francesa posee una participación del 50,1% del proyecto, mientras que, Tsingshan, que, a su vez, financió la construcción de la planta de litio, tiene una participación del 49,9%.
A pesar de que la fase uno del proyecto aún está en su etapa de construcción -tiene una capacidad de producción anual estimada en 24 kt (kilo toneladas) de LCE- Eramet proyecta alcanzar las 75.000 toneladas LCE, dado que, en la segunda fase, espera producir unas 30 kt adicionales.
En esta línea, Eramet confirmó la decisión de inversión para la segunda fase de Centenario, aunque sigue pendiente la obtención de los permisos de construcción.
Se espera que la producción comience en el segundo trimestre de 2026, mientras que, alcanzará su plena capacidad operativa a mediados de 2027.
Además de la expansión en Centenario, Eramine, la subsidiaria local del Grupo, iniciará perforaciones para la exploración en los terrenos que posee en el cercano salar de Arizaro.
El litio salteño ya tiene comprador
En julio, Eramet cerró un acuerdo de u$s 400 millones con el gigante de los commodities, Glencore, para vender el litio producido en Salta. De acuerdo a lo firmado en ese entonces, las empresas comercializarán 50.000 toneladas del ingrediente clave para baterías durante cinco años.
Los fondos de Glencore fueron un anticipo para financiar los proyectos de crecimiento de Eramet en la transición. El importe se pagó por adelantado y los volúmenes se venderán, durante cinco, años a precio de mercado.
Para viabilizar la construcción del proyecto, en abril de este año Eramet recibió la confirmación de la elegibilidad de la Fase I del proyecto para el régimen de promoción de inversiones en Argentina, lo que permitirá beneficiarse de una exención parcial del control cambiario actualmente vigente.
Eramine Sudamérica, la filial argentina de Eramet, se convirtió así en la segunda compañía minera en integrarse en este régimen con el que se espera dinamizar los plazos y la ejecución de obras para la puesta en marcha.