Mónica Juárez, diputada y presidenta de la Comisión de la Mujer, informó en diálogo con Nuevo Diario que la visita de las directoras del Observatorio de Violencia contra las Mujeres era una visita pendiente para analizar el resultado del trabajo del organismo durante el año pasado.
“De ahí, derivó en comenzar a trabajar mucho más en conjunto, anexando todas las partes técnicas que ya están trabajando con la legislación que nosotros tenemos. Fue acordar, de ambas partes, mi compromiso para seguir trabajando en equipo y para ponernos en sintonía y sinergias para trabajar mucho más”, expresó.
Juárez indicó que el resultado más favorable de la reunión fue el compromiso de poner una fecha para capacitar a los legisladores en materia de violencia contra la mujer en todos sus ámbitos, como violencia institucional o violencia política.
La legisladora destacó la labor del Observatorio y afirmó que “toda mujer que esté trabajando en pos de que no haya violencia, siempre suma y siempre es bueno y es positivo”.
Sobre las consejerías terciarizadas para embarazadas
En su última sesión, la Cámara de Diputados dio media sanción a un proyecto de ley que promueve asesorías para embarazas en los hospitales, a cargo de organizaciones no gubernamentales.
La situación generó polémica, además de la oposición de las organizaciones feministas, e inclusive de la propia Secretaría de Mujeres, Géneros y Diversidades, que ven este proyecto como una verdadera amenaza en términos de ganancias conquistadas de derechos sobre las decisiones de los cuerpos, tras la vigencia legal y real de la Ley IVE e ILE
Una de las mayores controversias, según analizan desde las organizaciones feministas y la Secretaría de mujeres, es que sería una forma encubierta de inducir a las mujeres a no llevar adelante la interrupción del embarazo, aún cuando la decisión fuera esa.
Sobre ello, Juárez expresó que acompañó el proyecto para que se trate en el recinto y consideró que los acompañamientos siempre suman, pero que una persona es “apabullada” con distintas organizaciones y modos de pensar, “es incómodo”.
“Las organizaciones y demás, muchas veces vienen con ideas muy marcadas. Y eso no sé si suma al acompañamiento del que se necesita para una mujer que está vulnerable. Puede ser tendencioso y eso sí me da mucho miedo. Sin embargo, me parece que siempre todo lo que sume para acompañar a una mujer es bienvenido”, consideró.
