Si bien el fiscal actuante imputó al sospechoso identificado con el seudónimo “pantriste” por los delitos de abuso sexual con acceso carnal y robo en concurso real, expresaron que se debería incorporar a la caratula el intento de homicidio agravado por violencia de género, dada la situación que le tocó vivir a la mujer de 23 años.
Tras su detención ocurrida el miércoles en la madrugada, el victimario fue imputado por la justicia por un abuso sexual cometido contra la joven en un sector del asentamiento San Javier. El hecho que se investiga sucedió en la jornada del martes, cuando la víctima regresaba a su domicilio alrededor de las 22 previo a encontrarse con su tía a quien le debía una suma de dinero. Otra versión señala que ella regresaba tras acudir al Vertedero San Javier donde recolecta por lo general algunos elementos que le permiten obtener algunos pequeños ingresos para su sostén y el de su hijita de 3 años.
El fiscal Penal 2 de la Unidad de Delitos Contra la Integridad Sexual (UDIS), Rodrigo González Miralpeix, imputó provisionalmente al sujeto por los delitos de abuso sexual con acceso carnal y robo en concurso real. La joven de 23 años, tras haber ocurrido el abuso, hizo la denuncia en la comisaría de barrio Solidaridad. Conforme a los detalles de lo ocurrido, la mujer pudo identificar al agresor sexual que no solo cometió el aberrante delito, sino que previamente, tras sorprenderla en un descampado, la arrastró, la maniató con sus prendas íntimas, la amordazó, la asfixio e intentó ahogarla en un charco de agua; además de amenazarla si efectuaba la denuncia porque “la iba a pasar mal como también la hija pequeña que vive con ella”.
Y como la joven recibió fuertes golpes en el tórax y la cabeza, así como la asfixia e intento de ahogamiento en un charco de agua, se concluyó que tuvo claras intenciones de matarla y de llegar a cometer un femicidio.
La UDIS tomó intervención luego de que la mujer de 23 años radicara la denuncia en la que aseguró que el individuo concretó el ataque y violación frente a la planta depuradora existente en el lugar.
De acuerdo al relato la mujer, le quiso dar dinero para que no concretara la violación, pero el imputado no solo se quedó con el dinero sino que cometió el aberrante hecho. Manifestó que tras estar atada intentó gritar en pedido de auxilio, pero éste la asfixió y luego la llevó a un charco de agua donde intentó ahogarla para que desista de su resistencia.
Tras la denuncia de la mujer, el hombre fue detenido en la madrugada del miércoles 10 de enero y se encuentra alojado en la Alcaidía General de la Provincia.
El caso “pantriste” se convirtió en uno de los primeros del año por violencia de género.
Afirman que pese a denuncias previas, el sujeto fue beneficiado
La situación del violador del asentamiento San Javier de la ciudad de Salta está muy comprometida, debido a que reuniría antecedentes por denuncias similares y más contra menores de edad.
Familiares de la joven que fue violada la noche del martes, afirmaron que tiene denuncias por violaciones sexuales pero que, a los pocos días, el individuo terminó siendo liberado por la justicia.
También indicaron que la víctima reside en el lugar desde hace más de un año, y que “Pantriste” -el acusado- conocía los movimientos de la mujer, inclusive que tiene una hija, puesto que la amenazó con matarlas a ambas para que no hiciera la denuncia.
El padecimiento de la joven se extendió por alrededor de 3 horas hasta que el violador se alejó al ver que unas personas arribaran al sector para dar auxilio a la mujer.
Los suegros ayudaron con la captura
Si bien “Pantriste” prácticamente es un hombre de la calle, tiene pareja y cuando se dirigió a la casa de sus suegros, los mismos se dieron cuenta que era él quien había cometido el delito, gracias a la descripción que dio la joven, sumado a que en sus prendas había rastros de sangre. Cabe destacar que el violador también se encontraba bajo los efectos de estupefacientes. Lo retuvieron en esa vivienda hasta que llegaron los efectivos policiales para detenerlo.
La víctima recibe ahora contención psicológica, tras ser dada de alta del hospital Materno Infantil a donde fue derivada tras sufrir el ataque sexual.
También será incluida en los programas a las víctimas de ataques sexuales y de violencia de género que dispone tanto el gobierno nacional, provincial y municipal.
