El procedimiento abreviado se llevó a cabo en la Sala III del Tribunal de Juicio en feria, presidido por la jueza María Gabriela González.
La imputada fue denunciada por su hermana, por un hecho ocurrido el 31 de octubre del año pasado. La damnificada refirió que esa noche se encontraba en su casa de Villa Primavera, junto a su madre, mirando televisión.
En ese momento legó su hermana, alterada, y comenzó a acusarla de haberle sacado mil pesos y le exigió que se los devolviera.
Ella no le prestó atención y, repentinamente, la acusada comenzó a agredirla físicamente primero con un martillo y luego con un palo. La denunciante dijo que logró salir de la casa con ayuda de unos familiares y de un vecino.
Ante este hecho, la damnificada solicitó la exclusión del hogar, manifestando que su hermana tiene problemas de adicciones y que no es la primera vez que reacciona con violencia si sus familiares se niegan a darle dinero para seguir consumiendo sustancias prohibidas.
La jueza ordenó la libertad de la condenada por la modalidad de prisión en suspenso dictada y le fijó reglas de conducta que deberá cumplir durante dos años para conservarla.
Entre ellas, no cometer nuevo delito; someterse a tratamiento psicológico para superar su adicción a las drogas y para controlar sus impulsos violentos, acreditar el inicio en un plazo de quince días y presentar constancias de su evolución cada tres meses; abstenerse de acercarse al domicilio de su madre y hermana y de ejercer actos de violencia física o psicológica en contra de la denunciante, entre otras obligaciones.
Imputada por golpear a su hija
La jueza del Juzgado de Garantías 5, María Edith Rodríguez, declaró la incompetencia territorial de ese juzgado en relación a la causa seguida contra G. M. D. (26), por lesiones graves agravadas por el vínculo.
G. M. D. quedó imputada por el delito de lesiones graves agravadas por el vínculo a partir de la denuncia presentada por una profesional del Hospital Materno Infantil. La denunciante refirió que el 13 de enero ingresó a la terapia intensiva una niña de 4 años de edad en compañía de su madre, G. M. D. La menor presentaba un cuadro de shock distributivo secundario a un trauma abdominal contuso cerrado, caso confirmado de Covid positivo, pancreatitis postraumática y síndrome ascítico hematoso, entre otros.
