Otro duro cachetazo para el Santo

Resistencia: Juventud Antoniana sigue sin encontrar el rumbo. Y lo que es peor, su juego muestra falencias alarmantes.
Ayer, salió perdiendo desde el vamos. Mulieri se vio obligado a cometer penal, tras una desatención del fondo antoniano.
López puso a los chaqueños en ganancia.
Juventud no tuvo reacción. Con jugadores pesados, que siempre llegaban tarde y con        desacoples en todas sus líneas.
El rival no fue un dechado de virtudes. Venía de perder sus dos partidos, pero al menos ayer  mostró orden y salida permanente. Por eso no extrañó que aumentara el marcador. Juan Pablo Passaglia puso justicia. Todo era cuesta arriba para el Santo.
En la reanudación, el equipo de Ragusa mostró una cara distinta. Salió dispuesto a achicar la ventaja.
Se apoderó de la pelota, merodeó las cercanías de Monzón, pero tanto Balvorín como el “Ratón” Ibáñez, siguen peleados con el arco. Y pedirle a los volantes que solucionen la anemia ofensiva, es como pregonar en el desierto. De hecho volvió a quedar sin poder marcar un gol.
Los chaqueños hicieron correr la pelota y cuando se lo propusieron, volvieron a desnudar las       desatensiones del visitante. 
En una de esas acciones, Mulieri volvió a cometer una infracción dentro del área. Fue penal que el árbitro José Sandoval no se animó a sancionar.
Pero de todos modos aumentó el marcador. 
El grandote Gravanago, que había ingresado un rato antes, no desaprovechó el regalo a la salida de un corner. Fue 3 a 0.
Juventud debe corregir sus errores, que son varios. Sabe que un nuevo traspié lo dejará sin posibilidades de avanzar a la otra ronda del torneo.