El participante más querido de esta edición del reality no se quedó callado y, ante la acusación, le hizo una tremenda cortada de rostro. “¡Nunca voy a bailar con usted!”, lanzó el joven oriundo de Salta luego de darle una palmada en la espalda a la exdiputada del Frente de Todos y alejarse de ella.
Este sábado por la noche, Rodolfo, el papá de Nacho Castañares, fue el encargado de preparar un asado en la parrilla de la casa. Mientras se cocinaba a fuego lento, los hermanitos bailaron típicas canciones del folclore argentino. En un momento, Romina intentó danzar con Marcos y le criticó sus pasos: “Primo, usted es un salteño trucho”.
Ofendido por los dichos, Ginocchio se alejó de su compañera mientras de fondo sonaban los Manseros Santiagueños y le repitió dos veces que nunca va a querer bailar con ella. Si bien el ida y vuelta pareció ser con un tono irónico, en las redes sociales los fanáticos del concursante apoyaron su reacción y repudiaron a la exdiputada. “Se lo dijo dos veces para que le quede bien claro”, “Del lado Marquista de la vida”, “Se fue y la dejó bailando sola”, comentaron algunos de ellos.
Sin embargo, Marcos no le negó el baile a su querida hermana, Valentina. Desde su ingreso a la casa, ambos dejaron ver la excelente relación, unión y tranquilidad que hay entre ellos. Por eso, mientras en los parlantes de la casa se escuchaba la canción “Y así, y así” de Luciano Pereyra, los dos protagonizaron una tierna escena familiar.
Romina Uhrig cometió un error con su única aliada en Gran Hermano y está cada vez más sola en la casa. Tras la partida de su sobrino, a quien destrató durante su corta estadía, hizo un chiste sobre las supuestas infidelidades del novio de Julieta Poggio y la actriz la fulminó con la mirada. “No digas eso”, reaccionó dolida.
El episodio se desencadenó en la cocina, cuando la exdiputada hizo un gesto con la cabeza y pronunció: “Juli, cuando te enterás que tu novio te está engañando”. Incomodísima, la joven participante puso cara de pocos amigos y marcó distancia de su compañera, con quien soñaba llegar a la final.
Poggio descubrió las aventuras de su pareja a través de un grito. “Lucca te cagó. ¡Cornuda!”, escuchó mientras descansaba en el jardín junto a su hermana Camila y Marcos, que quedó impactado. Las aguas se calmaron horas después, cuando él le envió una foto con un primer plano de sus genitales para que “no le extrañe”.