“Es fundamental resaltar que la derogación del régimen de agentes de viajes impacta directamente sobre los derechos adquiridos por las empresas de viajes y turismo que, cumpliendo con esta ley, brindan seguridad a los pasajeros y estabilidad al sector", expresaron desde la institución a través de un comunicado.
Puntualizando hacia la provincia de Salta, por excelencia turística, Nuevo Diario indagó sobre los efectos de estas modificaciones propuestas por el gobierno nacional liberal libertario, en el sector turístico local. De este modo dialogamos con Gustavo Di Mecola, propietario de la empresa UMA Travel, quien acompañó al reclamo de la Federación, aunque destacó la necesidad de analizar modificaciones en el marco regulatorio de la industria turística.
En ese sentido, el empresario analizó que: “Es verdad que la ley de turismo quedaba cada vez más lejos de la realidad, pero era nuestro marco de soporte para los profesionales del sector, cámaras, asociaciones, empresarios, académicos en general” y remarcó: “En la Argentina hay más de 5.000 mil agencias de viajes, es decir miles de puestos de trabajo. Nunca entendimos por qué lo de "monopolios"”.
Di Mecola alertó, además: “Sin este marco de la ley, se multiplicarán las estafas, al no tener alguien que les exija o regule a prestadores de servicios o simples vendedores. Los consumidores no tendrán más un ministerio donde ir a pedir ayuda, después de pasar por la oficina de derecho al consumidor (que además tendrán que capacitarse para entender sobre prestaciones turísticas) si tienen algún problema claro”.
“Con esta derogación se olvidó y menospreció la historia de todos los profesionales del sector que hicieron y hacen que la Argentina tenga una marca turística registrada de calidad a nivel mundial que nos llena de orgullo”, concluyó el referente empresarial pyme salteño, con profundo pesar.
Máxima preocupación
Desde los distintos sectores que componen la Federación alertaron que la desaparición de esta norma, tal y como plantea el DNU, promovería una competencia absolutamente desleal con personas que no son profesionales de la actividad turística y que no tendrán ningún control para cumplir correctamente con su labor.
La Faevyt adelantó que trabajan en la consolidación de su sello de calidad, así como en otras herramientas que le darán aún más solidez y seguridad a las empresas de viajes y a los pasajeros.
“Somos uno de los sectores más amplios, diversos y competitivos de la Argentina. Son cientos de miles de puestos de trabajo que se ponen en riesgo frente a una competencia desleal que tendrá también consecuencias directas sobre los usuarios, por eso avanzamos con este amparo solicitando que esta medida se declare inconstitucional”, destacó el comunicado.
