El principal es que los comercios no pueden hacer diferencia de precios en el pago de contado efectivo, tarjeta de débito y de crédito en un pago, aunque esté de oferta el producto. El segundo es que en las compras online rige el derecho de arrepentimiento por el plazo de 10 días y finalmente tener presente que se encuentra vigente la ley que establece que los cambios de los productos pueden realizarse en cualquier día y horario de atención al público del comercio.
Compras presenciales
Los consumidores que realicen la compra en un comercio físico deberán tener en cuenta que todos los productos tienen garantía o derecho a la reparación por ley en caso de presentar fallas y que el traslado al service oficial está a cargo del comercio.
Cabe recordar que no es obligatorio contratar garantías extendidas, es una práctica prohibida, y si así se hiciera se deberá dejar constancia de dicha situación en el libro de quejas.
Si se compra un artefacto eléctrico, se debe realizar una prueba en el lugar de compra. Los consumidores deberán informarse sobre las políticas de cambio directo en caso de falla, específicamente la cantidad de días que tienen para hacerlo.
Los consumidores pueden utilizar el libro de quejas y dejar constancia de un reclamo otorgando un plazo de resolución y los datos personales para informar la solución, caso contrario se podrá hacer denuncia y utilizar como prueba lo asentado en el libro.
Se debe exigir que respeten las promociones y los precios exhibidos aunque el mismo sea irrisorio, si no son respetados se debe sacar fotos y además dejar constancia en el libro de quejas al igual que si cobran recargo al precio de contado si paga con débito o crédito en una cuota. Tampoco se podrá exigir una compra mínima para utilizar la tarjeta de débito o crédito.
Al comprar en lugares que otorguen ticket o factura se puede realizar denuncia en Defensa del Consumidor y en caso de fallas exigir la garantía.
Compras Online
Para evitar fraude o estafas se recomienda no comprar en redes sociales, mail o por whatsapp ya que las mismas no son plataformas de compras, y no permiten identificar a ciberdelincuentes.
