Ana Enriquez, vecina de barrio Las Colinas, informó a Nuevo Diario que desde hace cinco años reclaman la obra de un pozo nuevo a Aguas del Norte, quienes les aseguraron que esa iba a ser la única solución a la falta del servicio. Luis María García Salado, director de la empresa, se comprometió a realizar esa obra en 2021, la cual nunca se realizó. Además, indicó que no les atiende el teléfono ni los recibe.
“Pagamos 700 pesos y tenemos agua 30 minutos por día. Somos 4 mil familias, ¿qué hacen con la plata de todos nosotros?”, remarcó y agregó que deberían gastar los fondos obtenidos de Nación en obras “y no en campaña”.
Además de la falta del servicio, hay denuncias de maltratos por parte de las empresas que manejan los camiones cisternas según informó Enriquez. La situación se informó a Aguas del Norte, que aseguraron desconocer los hechos sucedidos.
La vecina indicó que los vecinos reclaman todos los días en el Ente Regulador de los Servicios Públicos, a cargo de Carlos Saravia, donde tampoco consiguen respuestas a la situación.
“Estoy indignadísima. Nos versearon toda la vida a nosotros. (Gustavo) Sáenz dijo que desde que está se acabaron los problemas del agua. Esto es una burla”, dijo.
Sumado a ello, contó que siguen sin ripio ni cordón cuneta en el barrio, un pedido que se realiza de manera constante a la intendenta Bettina Romero y realizaron también movilizaciones para ser atendidos. Tras una reunión con Aroldo Tonini, secretario de Ambiente y Servicios Públicos municipal, en la barriada y la promesa de obras, las cosas siguen exactamente iguales.
Soledad Castaño, vecina de barrio Floresta, comentó que hace unos años se realizó una obra grande para dar solución al problema de agua tanto a dicho barrio como a los aledaños. Sin embargo, la obra no está en las mejores condiciones.
“Es tanta la presión de agua, que continuamente se revientan las mangueras. Ellos dicen que utilizaron material de primera, pero vemos el derroche continuo de agua por las calles, que a veces se va como rio y afecta a los vecinos de Constitución y Villa Mitre. No es que no hay agua, sino que las obras no están bien dirigidas”, indicó.
Asimismo, Castaño criticó la falta de accionar del gobierno con respecto a la crisis habitacional, ya que eso llevó al armado de un nuevo asentamiento arriba de Floresta que se encuentran sin servicios por estar en esa ubicación, sobre la obra realizada que no cuenta con una bomba para subir el agua. Sumado a ello, en esos terrenos iba a realizarse un dique de contención con 114 millones de pesos que habían llegado de Nación. La obra no se realizó, se realizó el barrio y se desconoce que sucedió con los fondos.
Las vecinas aseguraron que continuarán luchando por sus derechos y exigiendo al Estado provincial y municipal que se los garantice.
