Al respecto, el subsecretario de Ambiente de la Municipalidad, Federico Casas, dijo a Nuevo Diario que además de la finalización de la tracción a sangre, esta reconversión tiene muchos beneficios para las familias carreras, con las cuales la municipalidad trabajó de manera transversal, con otras dependencias como Acción Social y también con la Cooperadora Asistencial.
Ya en el acto formal, el jefe comunal se mostró emocionado e indicó que si bien hubo mucha resistencia y dudas sobre el fin de la tracción a sangre, resaltó el trabajo mancomunado para la contención e inclusión de estas más de 370 familias, y enfatizó que después del 4 de agosto, quienes persistan en los carros con caballos, serán multados, y los animales secuestrados.
Quien dio todos los detalles de la reconversión, fue el secretario de Gobierno de la Municipalidad, Luis María García Salado, quien además de manifestar su satisfacción y la alegría en el sector carrero, advirtió y lamentó la existencia de una parte de los mismos, que todavía pone resistencia, y amedrenta a los demás para que no se sumen a la reconversión.
Una de las mayores incógnitas se centraba alrededor del valor de cada uno de los motocarros, y de las facilidades que la municipalidad le brindará, frente a lo cual García Salado informó que se adquirieron 60 unidades, con un valor de 57 mil pesos, y que en una primera etapa se entregarán 30 rodados.
En cuanto a los requisitos para acceder a los mismos, en primer lugar es la entrega de los carros , y una vez entregada la unidad motorizada, la municipalidad reconocerá el 70% de su valor. Del 30% restante, se le reconocerá la mitad, si el carrero entrega el caballo a alguna ONG, o fortín con la que exista convenio; en tanto que el 15% restante, será reconocido a través de una contraprestación de servicios.
El secretario de Gobierno afirmó que quienes ya se encuentran empadronados, y manifestaron su voluntad de continuar trabajando en los carros, iniciarán cursos para obtener las licencias para conducir, además de otras capacitaciones en seguridad, que serán dictadas en los diferentes Centros Integradores Comunitarios.
Por último, enfatizó que la entrega de los motocarros estará condicionada, en primer lugar al hecho de que los carreros no podrán vender estos vehículos, salvo que sea para mejoramiento de la actividad, o después de determinado tiempo.
Y por otro lado se aseguró que la Municipalidad realizará un seguimiento de la situación real de las familias carreras, advirtiendo que antes de la entrega, cuya fecha aproximada será antes del 4 de agosto, según estimaron, ya existían ofertas de compra de estos vehículos.
Por su parte, los carreros que se hicieron presentes, se manifestaron conformes ante lo que consideraron una oportunidad de crecer. Si bien muchos desconocían el mecanismo de contraprestación con la municipalidad, entre otros puntos, destacaron por sobre todo que con estos vehículos podrán recorrer mayores distancias, en menor tiempo.