No obstante y durante la pandemia, la preocupación para estas familias fue en incremento, pese a las medidas tomadas, para frenar el aumento de las cuotas, que muchos casos son ya insostenibles.
Si bien a fin del año pasado consiguieron que el Banco Central de la República Argentina (BCRA) postergara las cuotas impagas hasta el próximo 31 de marzo. "Es una medida de alivio necesaria", pero insistieron en que "sólo patea unos meses el problema. La convergencia arranca en febrero, pero esperamos que llegue la solución de fondo antes".
Así lo dijo a Nuevo Diario, Mara García, representante del sector en Salta, anticipando que el panorama que se viene no resulta alentador: "Vamos a seguir indexados", dijo con preocupación, tras la reunión que el colectivo mantuvo con el actual ministro de Desarrollo Territorial, y Hábitat, Jorge Ferraresi en diciembre del año pasado, y a partir de la cual se definió la finalización del congelamiento, pero no del diferimiento: "Seguimos manteniendo el diferimiento de las cuotas hasta el 31 de marzo", aclaró García.
"Seguimos necesitando una solución de fondo y que nos saque de cualquier sistema de indexación, pedimos el congelamiento de la UVA porque de esta manera se nos va a congelar nuestro capital adeudado", dijo y agregó que "a pesar de que sabemos que las cuotas claramente se nos van a disparar, nos preocupa más todo aquello que ya se nos disparó durante estos años el capital adeudado". En ese sentido, la referente ejemplificó que en su caso, adquirió en febrero de 2019 un préstamo bancario de $1.400.000 y "le voy a deber al banco $3 millones y un poco más, y nunca voy a terminar de pagar".
"Terminamos aumentando nuestra deuda, y hoy, el congelamiento ya no nos sirve para nada", concluyó insistiendo que: “Con una inflación estimada del 3 por ciento mensual, las cuotas subirán en un año y medio entre 170 y 190 por ciento, sin congelamiento y sin posibilidad de diferir hasta el final del crédito, se va a convertir en una bomba de tiempo que será imposible de pagar".
Cabe recordar que 2019, las cuotas fueron congeladas, y cuando llegó el descongelamiento, lo que quedó impago se prorrateó en un esquema de convergencia. Cuando iba a empezar a aplicarse, volvieron a congelarse las cuotas por la pandemia, en marzo de este año. En septiembre se extendió la medida, hasta enero 2021. Desde febrero se aplicará un esquema mediante el cual volverán a pagar la cuota, que se actualiza por inflación, y se le sumará durante 18 meses lo que quedó impago entre 2019 y 2020.