La novena inició el viernes 3, a las 17, y se extenderá hasta la Fiesta Grande. Hoy las misas serán a las 6 y 8, mientras que a las 10:30 será la celebración central. Por la tarde están previstas a las 17 y 20 hs. Estiman la llegada de más de 20 mil personas.
"La Fiesta chica se distingue por la participación de los misachicos de las personas que van con sus imágenes y acompañan al señor de Sumalao. Llegan el domingo a la madrugada. Estimamos que llegarán más de 300 misachicos", señaló el padre Sergio Choque, párroco encargado de la iglesia de La Merced del municipio homónimo.
"Los servidores y el municipio están viendo la posibilidad de darle un té o mate cocido a los integrantes de los misachicos", agregó el sacerdote.
"Seguimos el trabajo que se hace como iglesia de unirnos y seguir y caminar juntos. Es lo que nos propone la iglesia y pusimos como intención para este año. Cada uno con su talento y carisma que Dios le ha dado", explicó Choque.
El sacerdote, recordó que en la última fiesta Chica que se celebró tres años atrás, antes de la pandemia, unos 20 mil devotos participaron de los cultos y espera que este año sea igual.
En el 2.021 las celebraciones se hicieron en La Merced. "Los siete viernes los hicimos en Sumalao y justo cuando estábamos por hacer la Fiesta Chica volvieron las restricciones y tuvimos que traer la imagen a La Merced. En el 2.020 hicimos la Fiesta Chicha y Fiesta Grande en La Merced donde participaron no más de 30 personas y no hubo siete viernes", contó el sacerdote
Organización
Por otro lado, Choque dio detalles de cómo se viene organizando la actividad religiosa que este año por primera vez le toca al intendente Javier Wayar. Concejales y fonderos se quejaron por la falta de acondicionamiento del predio externo al santuario.
"Ya nos reunimos con el municipio y las instituciones como Policía, SAETA y finqueros del lugar para organizar todo. Nosotros somos responsables sólo del predio del santuario y para la procesión dependemos de los finqueros de los alrededores", aclaró.
Detalló que hasta el viernes había reclamos de concejales y fonderos respecto al estado de los alrededores del santuario debido a que el municipio aún no había regado el terreno. "Al no tirar agua pasan los vehículos y la mercadería de los comerciantes se llena de tierra. Se arregló provisoriamente una bomba, pero parece que no estaba bien hecha porque me decían que salía agua turbia", dijo.
En tanto, la Policía dispuso operativos en las rutas de La Merced y San Agustín que llevan al santuario. Se informó que sobre la ruta nacional 68 habrá controles permanentes para vehículos y peregrinos, tanto para los que llegan de la zona sur del Valle de Lerma como los provenientes de la ciudad de Salta. La ruta provincial 36 tendrá dispositivos desde Rosario de Lerma hasta La Florida.
