Por deudas, redujeron la proyecciones de las películas Marcela Domínguez fue hasta hace poco directora del Centro Cultural 13 de Febrero, que tiene un teatro - cine. Luego que recibió varios reclamos de las distribuidoras de películas por falta de pago, renunció.
Oscar Serrano, periodista de esa ciudad, explicó que parte de la recaudación de las entradas de la proyecciones de las películas iba en porcentaje para el pago de las distribuidoras, y otra para el INCAA y pago de impuestos.
"Lo que quedaba de dinero se depositaba en una cuenta del Banco Macro, de donde la Secretaría de Hacienda sacaba fondos para el mantenimiento del Centro Cultural. Las distribuidoras comenzaron a apurar a Marcela Domínguez ante la falta de pago, y ella hacía los reclamos a la Municipalidad hasta que se cansó y renunció", relató.
Precisó que en julio no hubo proyecciones de películas por falta de pago, por lo que el municipio comenzó a ofrecer funciones de teatro. "El cine se llena porque los guemenses no viajan a Salta. Las entradas se cobran cerca de $80.
Se suma que el viernes pasado rompieron una puerta principal de vidrio blindado y hasta ahora no la reemplazaron, está tapado con un cartón duro", señaló.
Una escuela se quedó sin película
Por la acefalía la situación del Centro Cultural empeoró, lo que se notó el viernes de la semana pasada y el martes, cuando 250 alumnos de la escuela Papa Francisco de El Bordo, tras horas de espera no pudieron ver la película que les habían prometido. El gasto de transporte que tuvo que afrontar la escuela, para trasladar los dos días a los niños, fue de tres mil pesos.
"Lo peor es que las maestras se comunicaron previamente con la Municipalidad para garantizar la proyección y les dijeron que estaba todo listo”.