La víctima está desaparecida desde principios de noviembre de 2011, luego de que reclamara por irregularidades en el pago de su trabajo como cosechero de frutas, contratado por la empresa Expofrut.
Peritos de Gendarmería Nacional realizaron ayer un relevamiento alrededor del pozo (o jagüel, como le llaman en el sur) ubicado en el campo La Manuela, en la localidad rionegrina de Choele Choel, donde se sospecha que fue arrojado el cuerpo del joven trabajador salteño Daniel Solano, quien está desaparecido desde principios de noviembre de 2011, luego de que reclamara por irregularidades en el pago de su trabajo como cosechero de frutas, contratado por la empresa Expofrut.
El abogado Sergio Heredia, quien junto a su colega Leandro Aparicio, representa a la familia de la víctima en la querella que interpuso en la causa abierta para investigar este hecho, informó que la inspección fue ordenada luego de que los querellantes denunciaran que el pozo estaba "siendo adulterado otra vez", esta vez arrojando agua en el pozo.
Heredia también informó que en febrero se ingresará al jagüel a buscar el cuerpo del joven guaraní. "Estoy armando los equipos porque todo va a ser llevado desde Tartagal. Nosotros propusimos un método para bajar, usando equipos de Tartagal que diseñaron expertos aquí", explicó Heredia. El pozo tiene 80 metros de profundidad y tiene unos 30 metros de basura acumulada, desde chatarras hasta animales muertos. Todo eso deberá ser removido para poder empezar a buscar en el nivel donde se supone que puede encontrarse el cuerpo.
"¿Cuál es el problema (en relación a esta búsqueda)?", interrogó el abogado para responderse enseguida: todo el gasto de traslado del equipo y los expertos corre por cuenta de la querella. "Ese descenso lo tendría que hacer el Estado, no la querella", pero el Juzgado sostuvo que todos los aportes de la querella, que es la que está impulsando la investigación debieron correr por cuenta suya.
Encontraron más testigos
Heredia anticipó asimismo que la semana pasada estuvo en Alto La Sierra, en el Chaco salteño, de donde también fueron llevados indígenas a Río Negro por la misma empresa que contrató a Solano, Agrocosecha, que subcontrataba para la multinacional Expofrut. "Hemos acreditado y hemos conseguido testigos no solamente de la explotación laboral, sino también confirmamos el tráfico de cocaína y marihuana", afirmó.
Dijo que estos testigos ya fueron presentados en la causa federal que se sigue en la ciudad de General Roca por trata de personas y drogas, un desprendimiento de la causa principal por el crimen de Solano, que se sigue en la justicia provincial rionegrina de Choele Choel.
"Tenemos varios testigos que ya declararon, entonces es muy posible que pidamos la incompetencia del caso de trata de personas y de drogas que está radicado en el Juzgado Federal de Roca para que vuelva a Orán", adelantó el abogado.