El juez Julio Leonardo Bavio desestimó la denuncia efectuada en contra de Gustavo Montoya. Sin embargo, 12 días después pasó de denunciar a estar en el banquillo de los acusados, cuando fue detenido por un control de Gendarmerría en el Chaco llevando droga, en dos mochilas con 23 panes de cocaína de máxima pureza.
Con el agravante que tenía una camioneta con documentación falsa, como si perteneciera a Vialidad Nacional.
Zalazar quedó imputado por el contrabando en una causa que llevó adelante la jueza federal de Resistencia, Zunilda Niremperge.
Mientras tanto, la causa de la denuncia había avanzado y el fiscal federal de Salta, Carlos Amad, la tuvo para ser analizada. Sin embargo, Amad determinó que no existían pruebas para continuar con la causa. La elevó y la Cámara Federal de Apelaciones determinó que llegue al despacho del juez de turno Bavio.
El magistrado se hizo eco del dictamen de Amad y desestimó la denuncia. Zalazar había denunciado, en julio del año pasado, que en Aguas Blancas funcionaba una aduana paralela. Pero nada de eso tuvo continuidad en la investigación. La droga que llevaba cuando fue detenido arrojó un pesaje de 23,760 kilogramos. Había iniciado su recorrido en Orán y tenía como destino final Corrientes.