La iniciativa será debatida desde las 14 en la reunión de la comisión de Legislación General de la Cámara baja, que preside el diputado Daniel Lipovetzky (PRO).
Se trata de un proyecto del Poder Ejecutivo que pide declarar feriado el viernes 30 de noviembre, en procura de que "se minimice el impacto urbano producto de la disminución de la circulación de personas, y que se favorezca la ejecución de todas las tareas que resultan necesarias para el desarrollo exitoso de la cumbre".
La Cumbre de Líderes del G-20, que por primera vez se celebra en Sudamérica, se desarrollará entre el viernes 30 de noviembre y sábado 1 de diciembre con unos 8.000 asistentes, entre jefes de Estado, diplomáticos, autoridades ministeriales, agentes de seguridad y periodistas, calcularon fuentes del oficialismo.