En Córdoba, dieron una nota al programa Carburando, donde hablaron de sus experiencias, anhelos y expectativas.
Allí resaltaron de la importancia de formar parte de dos marcas que forman parte de un mismo grupo empresario, lo cual les aportaría mayor libertad para entrenar juntos y compartir juntos desafíos en carrera, algo que no corresondía cuando pertenecían a marcas rivales como Honda (Kevin), mientras Luciano corría primero para KTM y luego en Husqvarna.
“Si bien, nos permitían compartir entrenamientos, existían límites que no podíamos superar”, explicaba Kevin.
De todas formas, en una competencia tan exigente como el Dakar, siempre la cabeza está pendiente del hermano.
Así lo describía Luciano: “El que va adelante siempre siente miedo por el que viene atrás. Cada vez que pasás un peligro pensás. En mi caso me queda en la cabeza ‘Que Kevin haya pasado bien, que no le haya pasado nada’. Ahora que estaremos juntos seguramente nos vamos a ayudar”.
Respecto a los objetivos de ambos, Lucuiabi afirmaba: “Mi objetivo es mejorar el sexto puesto que logré en 2020 en el Dakar, además de pelear por el título mundial este año y llegar bien preparado a Arabia Saudita”.
A su turno, Kevin destacó: “Quiero ser campeón con las dos marcas”.