Bie expresó en diálogo con Nuevo Diario que la situación se inició en febrero de este año, luego de que se difundan audios del actual presidente de la Liga Salteña de Fútbol y también secretario de deportes de la provincia, Sergio Chibán, asegurando a Bie que era “un mafioso”.
Tras ello, el dirigente deportivo empezó a recibir amenazas que escalaron a amedrentaciones, daño a la propiedad y aprietes.
En ese marco, el pasado martes se realizó en el club una asamblea para presentar los estudios contables hasta el 31 de marzo. “En esa Asamblea, una agrupación narco criminal, creo que la más famosa y grande que hay en Salta, tomó el Club. Se paró en la Asamblea y dijo esto se corta acá, que renuncie toda la Comisión Directiva. En ese momento pensé ¿esto es Salta o es Rosario?”, dijo.
Incluso, remarcó que, si cualquiera de las dos partes se excedía durante la asamblea, hubiese “terminado mal” y la noticia hubiese sido “tiroteo en un club”.
Bie señaló que continúa siendo el presidente del club porque no hay validez jurídica en el accionar de la barrabrava. “Estimo que eso irá a la Justiica. Si hay un club tomado por una banda narco, hay que ir a la Justicia. Tengo denuncias contra esta gente y me dieron custodia”, remarcó.
En cuanto a su gestión, sostuvo que “molesta lo que crecimos” en un año. “Hay una forma de gestionar honestamente una institución deportiva. Ganamos 2 torneos de los 4 que jugamos, se agregaron disciplinas, empezó a haber ingresos, se mejoró el nivel de sponsors que es nivel de Federal A, tenemos buenos jugadores”, expresó.
La situación institucional afectó al equipo de fútbol que juega el Anual, que perdió un partido que, si ganaba, lograba la clasificación a la Copa Salta.
En ese sentido, remarcó que “las cosas a la fuerza tienen consecuencias” y señaló que ningún miembro de esta “nueva” comisión directiva asistió al entrenamiento “a dar la cara”.
Por otro lado, Bie fue expulsado ese día en un oficio de la Liga Salteña y consideró que fue “una decisión en caliente”. “Me expulsan por dichos del 25 de abril, sin decirme cuales son y no me dan el derecho a la legítima defensa”, indicó.
Antes de eso, ya había sido citado en la Liga Salteña en febrero donde se le muestra una “prueba”: un recorte de una entrevista donde manifestó que Chibán estaba sentado hace 25 años, omitiendo la parte “donde dije que es un crack” por mantenerse tantos años al frente de la institución.
“No me permitieron evaluar la prueba ni hacer un descargo. No hay dictamen de eso, pasa todo ese tiempo y hacen otro oficio de otra situación. En el hecho anterior pedí presentar pruebas y testigos, y nunca me respondieron”, comentó.
Sobre la figura de Chibán, manifestó: “Yo veo un capricho, alguien que se sale de sus cabales. Me eligió como enemigo y soy un presidente de un Club, un simple emprendedor. Creo que es un error”.
La política deportiva en Salta
El dirigente habló también sobre la situación de las políticas deportivas en la Provincia y expresó que hoy no existen, sino que únicamente hay cuestiones de infraestructura.
En ese marco, criticó el doble cargo de Chibán como “juez y parte”, sin tener un foco claro en las acciones para el deporte.
A su vez, consideró que el deporte debería ser un área incluida en el Ministerio de Educación por el aprendizaje en valores, responsabilidad, trabajo en equipo, compañerismo, compromiso y liderazgo; y que debería realizarse un seguimiento a los clubes de toda la provincia para conocer su situación y en base a ello buscar soluciones en base a la infraestructura.
