La versión policial indicó la presencia en las vísceras del tiburón de “dermis, grasa y carne humana”, al tiempo que divisaron “un tatuaje color rosa, verde y rojo con una inscripción ilegible” que los familiares reconocieron inmediatamente.
El hallazgo de los restos de Diego Barría (32) en las vísceras de un cazón aún genera conmoción entre los vecinos de Comodoro Rivadavia. Varios rastrillajes se realizaron durante la semana en búsqueda del hombre de 32 años desaparecido el sábado 18 de febrero Barría murió en Chubut. Unos pescadores hallaron sus restos en un tiburón cazón.
Ayer, su esposa publicó un emotivo mensaje de despedida en las redes sociales. "Mi corazón se fue con vos, te amo para siempre", dice el posteo de Virginia Brugger (30) en su perfil de Facebook, que subió acompañado por una foto de la pareja. El posteo tuvo casi 2 mil reacciones y cerca de 300 mensajes de condolencias.
Barría había sido visto por última vez el sábado 18, alrededor de las 23.30, cuando iba camino a su casa de campo, mientras se trasladaba en su cuatriciclo.
En el trayecto, paró a saludar a unos amigos pescadores y avisó a sus familiares que iba retrasado. Tuvo una penúltima parada, con un conocido del lugar. Esa persona fue la última que lo vio con vida.
Tras el paso de las horas y la no llegada a su casa, sus familiares denunciaron su desaparición. Y comenzó el operativo de búsqueda que tuvo un final inesperado: un pescador encontró dentro de las vísceras de un cazón un antebrazo con un tatuaje, que finalmente se determinó que pertenecía al joven desaparecido.
Previamente, el lunes, un grupo de búsqueda encontró su cuatriciclo destruido. A pocos metros estaba el casco, que presentaba abolladuras y estaba partido en la zona del mentón.
Mientras se realizaba el operativo, Brugger había publicado en sus redes otros mensajes pidiendo por la pronta aparición de su marido. “Dale mi loco! Los nenes ya están preguntando por vos! No nos hagas esto, aparecé, te estamos esperando". Tenían tres hijos.
Barría era un hombre fornido de 1,85 metros y trabajaba como operario en Viento Sur una firma dedicada a lo servicios petroleros en la provincia y con oficinas en Rada Tilly.
Los pescadores que hallaron sus restos contaron a la policía que habían capturado 3 cazones, también conocidos como “mini tiburones” porque su tamaño superior alcanza los 2 metros. En este caso los ejemplares medían 1,50 aproximadamente. Se suelen alimentar de otros peces como caballas, jureles y sardinas y poseen unos afilados dientes triangulares.
Uno de los pescadores profundizó en su relato ante la policía y explicó que había abierto uno de los cazones. En su interior descubrió partes de un cuerpo humano. Al escrutar con mayor cuidado el pescador pudo identificar piel que contenía un tatuaje de colores verde, rojo y rosa y perfilaba una leyenda difícil de comprender.
Las conversaciones se viralizaron en las últimas horas, tras el macabro hallazgo en Comodoro Rivadavia.
Sus diálogo por WhatsApp comenzaron a circular en Comodoro Rivadavia. “Tuve tanta mala suerte que lo encontré yo. Fui a pescar y se me da por abrir la panza del tiburón y encontré un antebrazo con un tatuaje”, señala uno de los pescadores en un presunto mensaje que ya es viral y dio a conocer Diario Jornada. “Alzamos las cosas, vinimos a Prefectura de Caleta y sí, era él”, agrega.
“A ese lo pescamos a las 8 y media, a las 9 alzamos todas las cosas y fuimos a Caleta. Le comentamos lo sucedido, le entregamos la bolsita con los restos humanos. Después me pasaron una foto con el antebrazo con una rosa que decía 'Josefina', se la mostré al de Prefectura y me dijo que sí, que era él”, cierra.
