Javier Milei confirmó también a través de un comunicado en la cuenta oficial publicado en la plataforma X que a partir del 10 de diciembre "la Dra. Florencia Misrahi será la titular" de la AFIP en el nuevo Gobierno que asumirá este domingo.
A su vez, se informó que distintos funcionarios del futuro gabinete "participaron esta mañana de una reunión" encabezada por el próximo jefe de Ministros, Nicolás Posse.
De ese encuentro formaron parte Guillermo Francos (Interior), Guillermo Ferraro (Infraestructura), Diana Mondino (Cancillería), Mariano Cúneo Libarona (Justicia), Patricia Bullrich (Seguridad), Luis Petri (Defensa) y Sandra Pettovello (Capital Humano).
También se hicieron presentes el designado portavoz presidencial, Manuel Adorni; la próxima secretaria de Comunicación, Belén Stettler; y quien tendrá a su cargo la administración del Banco Central, Santiago Bausili.
Mario Ruso cardiólogo, funcionario de todos
Entre 2000 y 2004, Russo fue coordinador del Servicio de Trasplante Cardiopulmonar Pediátrico en el Hospital Italiano, mientras que a partir de 2001 estuvo a cargo de la Unidad Coronaria de Fleni.
Al mismo tiempo, fue clave en el Hospital Polo Sanitario Malvinas Argentinas para poner en marcha el Servicio de Cardiología. Y fue secretario de Salud de los municipios de San Miguel, entre 2009 y 2015; y de Morón, entre 2015 y 2017, para luego convertirse durante menos de un año en secretario de Gobierno del entonces intendente Ramiro Tagliaferro.
De médico a funcionario
También fue subsecretario de Coordinación de Políticas Sanitarias y de Planificación y Contralor Sanitario del Ministerio de Salud bonaerense en tiempos María Eugenia Vidal. Desde enero de 2020 hasta mediados del año pasado fue director de Asuntos Gubernamentales en AySA, durante la gestión de Malena Galmarini.
Mientras era secretario de Salud de Morón, se dio un curioso episodio que terminó con la separación de los coordinadores médicos y administrativos del centro de salud de la localidad de El Palomar, donde había aparecido un sugestivo cartel pegado en el que se explicitaba a todo el personal que estaban obligados a denunciar a la policía cualquier “sospecha de aborto” de alguna de las pacientes.
Finalmente, desde el gobierno local debieron salir a aclarar que la pegatina oficial “no representa las opiniones ni las políticas sanitarias del Municipio de Morón”.