Boca sólo quiere algo de paz en la previa a su debut

Los últimos días fueron muy calientes: todo arrancó con las declaraciones de Sebastián Villa, quien en una entrevista afirmó que al plantel le había faltado actitud en la final de Libertadores perdida contra River en Madrid, con lo que le tiró sal a una herida que ya lleva tres años. Además, avisó que del 1 al 10, su relación con Riquelme es de 5 puntos.
Lugo estalló el lío con Wanchope Ábila, que disparó contra el Consejo de fútbol. El delantero, molesto porque no tiene lugar en la consideración del DT y no lo dejan salir, denunció amenazas e intimó a que resuelvan su situación antes del miércoles.
El viernes el que recogió el guante fue el propio Riquelme, quien fiel a su estilo no se guardó nada y la ligó hasta Carlitos Tevez. Román, sin vueltas, dijo que si el “Apache” se presenta a elecciones él le gana 85 a 15.
El sábado fue el turno del representante de Cristian Pavón, Fernando Hidalgo, que desmintió a Riquelme, quien había dicho que Kichán no había sido vendido porque justo llegó una denuncia por violencia de género en su contra.