Esta es una más de las consecuencias de gente que deja sueltos o sale a la calle con perros sin bosal, sobre todo aquellos considerados peligrosos o asesinos.
Ahora este caso quedó en manos de la Sección Ecológica de la Policía de Santa Fe y los dueños tienen una investigación penal.
El feroz ataque ocurrió el último fin de semana cuando la mujer de 46 años caminaba por el barrio junto a sus dos nietas, de ocho y 18 meses, rumbo al kiosco de la zona.
De un momento a otro fueron sorprendidas por dos pitbulls que salieron corriendo de adentro de una vivienda ubicada en el Pasaje Hermanos Madeo al 2900.
En solo segundos los dos animales comenzaron a atacar a la bebé en la zona de las costillas. Al ver esta escena la abuela se metió y a golpes trató de separarlos.
Esto provocó que también resulte con lesiones en el rostro, el cuero cabelludo, los dos brazos y las dos piernas. La nena de ocho años pudo escapar.
La menor sigue internada en el Hospital de Niños Orlando Alassia en grave estado. El director de la institución confirmó que la víctima tiene “fracturas costales que le provocan un hemoneumotórax” y que las heridas le causaron “un tórax inestable, motivo por el cual desde su ingreso al hospital está en la Unidad de Cuidados Intensivos con asistencia respiratoria mecánica”.
El último parte médico señala que su estado de salud “es crítico con pronóstico reservado por la gravedad de las lesiones” aunque con signos vitales normales.
Candela, la mamá de la menor, explicó que están esperando que en las próximas horas evolucione para ser operada.
“Cuando sentí la presión del perro en la mano, lo único que hice fue agarrar fuerte a la bebé, porque el animal se paró en dos patas. Lo único que hacía el perro era apretarme fuerte, traté de que no me tiraran al piso”, relató Jaquelina Insaurralde, abuela de las niñas.
Asimismo, aseguró el terror que vivió al ver como sufría su nieta: “Si no la soltaba se la comía. Intenté con todas mis fuerzas protegerlas. Cuando lo vi ya lo tenía encima”.
Érica, dueña de los pitbulls, contó que fue atacada por uno de los animales y que había solicitado que se los lleven: "Tengo dos suturaciones en la cabeza y 18 puntos de cada lado”.
“Escuchamos gritos afuera, y ahí vimos cómo estaba atacando a la mujer y a la nena. Mi esposo se metió para sacarle el perro de encima y un vecino lo ayudó a meterlo adentro”, contó.
La mujer además, señaló que quiso visitar a la víctima en el hospital, pero que no la dejaron entrar: “Soy responsable y estuve al tanto de todo lo que pasó", dijo.
NA
