El conflicto con los trabajadores autoconvocados del sector de Salud cobró este lunes, nuevos ribetes de tensión, luego de que en las primeras horas de la mañana, las mujeres que estuvieron en huelga de hambre varios días, trasladaron su reclamo a la Iglesia Catedral, a la espera de una reunión con el ministro de salud Federico Mangione.
“Al mediodía apagaron las luces, y entró la Policía diciendo que había una denuncia en nuestra contra porque habíamos tomado la Catedral, pero eso no es cierto, lo único que queríamos era que la Iglesia intercediera por nosotros, nos quieren tratar como delincuentes ahora en complicidad entre el Gobierno y la Iglesia”, denunció a Nuevo Diario Marina Guanca, una de las encadenadas.
El malestar y la drástica decisión de las manifestantes surgió luego del compromiso de Mangione, el viernes pasado cuando suscribió un principio de acuerdo por los reclamos del sector. El compromiso consistía en que el petitorio llegaría a las manos de la Intergremial para obtener el marco legal correspondiente para su aprobación, algo que nunca sucedió.
Lejos de interceder, el administrador de la Catedral procedió a la denuncia, y luego la policía, instó a desalojar las bancas a las mujeres, que se retiraron pacíficamente.
Quien se hizo presente en el lugar, mantuvo extenso diálogo con las manifestantes, fue la Secretaria de Seguridad de la provincia, Frida Fonseca: “es la única que mostró empatía con nosotras”, señalaron, aunque tampoco pudo resolver el conflicto.
Fonseca puso “paños fríos”
Nuevo Diario dialogó con la Secretaria de Seguridad de la provincia, Frida Fonseca, quien aseguró que en el encuentro con las manifestantes se planteó: “la voluntad absoluta del gobernador de destrabar el conflicto, y de que se pueda llegar a un acuerdo que no requiera medidas de fuerza”, sostuvo.
La funcionaria diferenció la situación de la docencia, a la que consideró “avanzada”, y a la espera de la conformación de las mesas técnicas para el análisis pormenorizado de los puntos negociados.
“Me comprometí personalmente a reunirme con los abogados que asisten a los docentes imputados en AUNOR como a las trabajadoras denunciadas este lunes, para analizar de qué modo se puede resolver, en primer lugar las situaciones de quienes están procesados, pero también quienes fueron denunciadas por la coordinación de la Iglesia”, puntualizó.
