Estas herramientas fueron pedidas a fin de evitar las picadas que los conductores desaprensivos protagonizan todos los días y con mayor desenfado a la noche y madrugada.
En la jornada de ayer, Matías Assenato, secretario de Tránsito y Seguridad Vial estuvo en calle Los Almendros, una de las arterias que rodea la plaza, verificando junto a técnicos del organismo comunal las factibilidades de colocar esos reductores de velocidad.
La plaza rodeada por las siguientes arterias: Los Olivos, Los Mandarinos, Los Azares y los Almendros, es un pulmón verde que disfrutan niños, adolescentes y mayores, y que si no se resguarda la seguridad vial puede traer aparejado un siniestro de envergadura.
Motocicletas, vehículos de distinta categoría se dan cita en la zona y lejos de disfrutar compiten por la velocidad que en pocos metros alcanzan para llegar hasta la avenida Bicentenario. Siendo un peligro para quienes transitan de modo “normal” la zona.
Con esta determinación el sector del barrio recuperará su actividad de paseos.
Cámaras de seguridad
Otra historia será con las cámaras de seguridad que están colocadas al igual que dos domos pero que carecen de conexión.
En un robo a una camioneta de hace algunos meses, al ir a efectuar la denuncia se advirtió de esas cámaras, pero grande fue la sorpresa del denunciante cuando le comunicaron no funcionan”.
Bueno es recordar que en el lugar hace unos años atrás hasta se vendía drogas desde camionetas de alta gama y no hace más que un año una situación de inseguridad hizo que una camioneta subiera hasta la vereda y el conductor amenazara a otro con un arma de fuego.
En la jornada de hoy Assenato llegaría hasta el lugar para verificar la colocación de los reductores.
Cuando salió la noticia de estos hechos otros vecinos nos comunicaron que el sector del barrio Autódromo existe una situación similar.
