El proyecto remitido por el ejecutivo municipal busca que el cuerpo de ediles autorice la desafectación de hectáreas que se encuentran en la localidad, para destinarlas a loteos sociales que serán entregadas a familias que mantienen el reclamo por tierras ante el municipio.
La polémica radica en que las tierras fueron adquiridas por el municipio que conduce Javier Wayar para la construcción de un Cementerio para la localidad de San Agustín, un parque urbano y una parte destinada a edificar un predio para los fortines gauchos.
En total totalizan 8 hectáreas que el concejo debe definir su destino.
¿Cuál es el origen de la disputa?
El problema ha significado un nuevo episodio de conflicto entre el concejo y el ejecutivo que conduce Wayar.
El motivo según señaló la concejala Mónica Berruezo a Nuevo Diario, radica en promesas incumplidas de las campañas electorales de Wayar para renovar su mandato al frente de la intendencia.
El padre del jefe comunal, “Carlitos” Wayar actual secretario de Obras Públicas, comento a medios locales que tienen relevadas alrededor de 140 familias a esperas de un lote.
Berruezo asevera que Wayar asumió el compromiso con estas familias previo a los comicios electorales. Lo que sostiene la edil es que el intendente debía avanzar en gestiones para obtener hectáreas que la Municipalidad pueda lotear a favor de esta gente. Ese compromiso nunca se materializó, según afirma Berruezo, y fue entonces que las familias, cansadas de esperar, avanzaron con manifestaciones sobre las tierras fiscales de la localidad de San Agustín. Ante la presión de las protestas sociales, es que la Municipalidad mercedeña decidió avanzar con esta propuesta.
El debate en el Concejo
Con el proyecto enviado por parte de Wayar, el intendente trasladó la discusión hacía el cuerpo de concejales. Esta es su motivación política según dijo Berruezo, dado que de esta forma no tendrá que confrontar ni con los manifestantes de las tierras, ni con la gente de San Agustín. Y es que, el reclamo de un cementerio es algo que la población de la localidad que responde políticamente a La Merced lleva adelante desde hace tiempo. Otra polémica del proyecto es que busca tercerizar a través de una comisión vecinal el proceso de selección de los beneficiarios.
