Por ello, el fiscal penal 1 de la Unidad de Delitos contra la Integridad Sexual, Federico Obeid, requirió ante el Juzgado de Garantías 2, la elevación a juicio de la causa que tiene como imputado al padre de la niña, acusado del delito de abuso sexual simple agravado por el vínculo y continuado, en perjuicio de una menor.
Según surge del requerimiento de juicio, existen fuertes pruebas en contra del acusado. Una de ellas es la declaración testimonial de la madre de la niña, quién relató los hechos ocurridos, los que fueron filmados por la denunciante.
Así, pudo conocerse que el acusado atentó contra la libertad sexual de su hija al someterla a tocamientos que comenzaron con fecha incierta en el trascurso de 2019, en la localidad de Las Lajitas y que habrían culminado en un hotel de la Ciudad de Salta, entre el 1 y el 2 de junio de ese mismo año.
El caso se activó a partir de la denuncia radicada el viernes 14 de junio de 2019 por la madre de la menor, de 3 años, y en contra el padre la niña, con quien mantuvo una relación de concubinato durante dos años y de quien se había separado desde hacía aproximadamente un año.
Al referirse a los hechos, la madre de la menor sostuvo que durante la celebración del cumpleaños número tres de su hija, observó que el acusado sometió a tocamientos a la niña, por debajo del pañal, mientras le daba la mamadera con la otra mano.
Ante semejante escena, agregó que decidió consultar los pasos a seguir con una amiga abogada, quien le recomendó que grabara a la niña para analizar la situación con otro profesional idóneo. Posteriormente, el lunes 10 de junio, la denunciante acudió a un estudio jurídico y tras esto, pidió que se adoptaran las medidas legales correspondientes y que se dispusiera una medida cautelar para prohibirle al acusado el acercamiento a la niña.
Días después, sin embargo, la mujer amplió su denuncia, tras recibir llamadas amenazantes desde un número privado, proferidas por un hombre. Al respecto, explicó que nunca antes había recibido amenazas telefónicas y que éstas coincidieron con el momento en que radicó la denuncia, además de remarcar que el acusado era una persona violenta y que no se había animado a denunciarlo, la mujer sostuvo que temía que le sucediera algo.
