“La verdad que somos un país bastante raro, dado que esto es un tratamiento express y que tenemos muy pocos minutos para argumentar la gran cantidad de artículos, voy a hacerlo a formato de título. Lo primero es que no se puede delegar facultades en alguien que no lee lo que firma, estamos hablando de alguien que da aumento a su gabinete y que después dice que no sabía que eso era lo que había firmado como haciéndose el distraído, como perro que volteó la olla”, expresó Estrada en el recinto.
Seguidamente, Estrada consideró que los regímenes de inversión son positivos, pero que los mismos deben ser para promover la industria y las cadenas de valor, y “no para ponerlo a competir de manera desventajosa”.
“Con este régimen los bienes de capital entran sin aranceles y la empresa que produce esos bienes de capital en la Argentina cuando importa los insumos, lo importa con aranceles. Un disparate”, aseguró.
En el mismo sentido, sostuvo que no hay buenas medidas para la industria y entre ello destacó el costo de la energía, ya que en el proyecto de ley se establece que el precio de la nafta va a tener que ser a precios internacionales.
“Le quiero decir que los que producen en el interior, por más que vos seas lo más productivo que puedas ser adentro de tu fábrica, cuando salís te da con que la logística y el transporte te pueden dejar afuera de mercado y con este proyecto de ley, el gobierno está encareciendo ese costo porque además elimina la obra pública entonces, todo lo que necesitas de infraestructura y el costo más importante que es el combustible, va a incrementarse por acción y por omisión”, dijo.
En cuanto a las privatizaciones, afirmó que lo importante de las empresas es que estén bien gestionadas y apuntó contra el legislador Rodrigo De Loredo asegurando que fue presidente de una empresa pública, ARSAT, solo por ser “yerno del ministro de turno”.
“No estoy en contra del capital privado de las empresas, de lo que sí estoy en contra es de que privaticemos empresas con un gobierno narcocapitalista que no cree en el Estado, que va a desregular todo y que va a terminar como ya sabemos, en los 90 todas las empresas estaban privatizadas y terminó todo estrellado”, recordó.
Asimismo, cuestionó el argumento de que se deben dar herramientas al gobierno nacional para llevar adelante su plan de gobierno: “¿Herramientas para qué? ¿Para eliminar los vuelos de Aerolínea Argentina? ¿Para eliminar el tren de Güemes a Salta? ¿Para eliminar el financiamiento de las universidades públicas, el subsidio al transporte? No, hay que pensar en las consecuencias de las leyes que se votan y de las leyes que se aprueban para que cada uno el día de mañana diga que tuvo conciencia de lo que estaba votando”, finalizó.
