Ayer, después de casi dos meses de permanecer cerrada, las puertas de la Catedral se abrieron para los salteños que anoticiados de la nueva disposición entrarán a saludar a sus Santos Patronos.
"A partir del protocolo nacional que se elaboró con el Ministerio de Culto de la Nación, nuestra Diócesis de Salta tiene sus indicaciones propias.
Hemos estipulado una capacidad máxima para cien personas dentro del templo. El ingreso será por la puerta del Jubileo (al costado de la Catedral) y el egreso por la puerta derecha de la Catedral que da al camarín del Señor del Milagro", detalló el padre Daniel Ochoa, vicario de la Catedral.
En las puertas de ingreso y egreso, voluntarios que se comunicarán entre si con Handy, regularán la capacidad establecida de personas. También pondrán alcohol en gel a los fieles, quienes además deben limpiarse los zapatos en paños embebidos en lavandina.
"No se pueden tocar objetos ni las imágenes y se deben respetar las distancias. Hoy (por ayer) no llegamos a las cien personas, vamos a ver cómo se desarrollan las otras jornadas. La apertura fue una sorpresa para todos porque no habíamos anunciado que íbamos a abrir", afirmó el sacerdote.
En esta nueva etapa del aislamiento, Ochoa pidió solidaridad y que los feligreses cumplan con las medidas sanitarias.
El protocolo aprueba las confesiones, pero cumpliendo con las medidas sanitarias. “En algunas parroquias podrán pedir turno con el sacerdote o bien podrá sentarse en el confesionario”, agregó.
En la Resolución N° 31 publicada hoy en el Boletín Oficial de Salta, se establece que los feligreses podrán asistir a los lugares de culto dentro del municipio correspondiente al domicilio, en de 8:30 a 20, de acuerdo a la terminación de su D.N.I., los lunes, miércoles, y viernes los que tengan terminación par y martes, jueves, y sábados los impar. El domingo no habrá distinción.